Nicolás Arancibia Bórquez

Everton de Viña del Mar tendrá un desafío mayúsculo en su objetivo de salir del penúltimo puesto de la tabla de posiciones de la Liga de Primera, ya que a partir de las 20.30 horas de hoy recibirá en los pastos del Estadio Sausalito a Universidad de Chile, elenco que con un partido menos se ubica en el sexto lugar de la clasificación.

La brega marcará el debut en casa del técnico Mauricio Larriera, quien se estrenó en la banca ruletera con una agónica derrota ante San Luis por la Copa Chile. A sabiendas que sus pupilos todavía no consiguen un triunfo en el campeonato, es que el charrúa instó a sus jugadores a "levantar el ánimo, porque si uno no tiene un buen ambiente de trabajo, es difícil competir".

Por lo mismo, medirse ante un elenco de la talla de los azules, es el condimento perfecto para que los ruleteros levanten su nivel de una vez por todas. Según el estratega uruguayo, el lance ante los laicos "va a ser un partido que nos permitirá motivarnos más a todos, porque sabemos que vamos a estar bajo los ojos de todo Chile".

De cara al planteamiento que el exadiestrador de Peñarol idea ante el equipo comandado por Gustavo Álvarez, y también pensando en lo que espera que Everton muestre en el futuro, el propio exlateral derecho adelantó que "tomar la iniciativa ante un equipo como la 'U' sería un buen paso, porque la idea es que más temprano que tarde el equipo se apodere de nuestra idea de juego, y uno de los pilares es tomar la iniciativa de los encuentros. Si lo hacemos estaremos más cerca de controlar a nuestro rival".

Si bien el reemplazante del brasileño Gustavo Leal aclaró que no ha tenido el tiempo suficiente para poder implementar todos y cada uno de los conceptos que espera que el plantel auriazul adopte, también recalcó que la derrota de la semana pasada ante San Luis lo ayudó a notar los puntos que su escuadra debe mejorar.

El exayudante de Gerardo Pelusso, justamente en el periplo del charrúa en la "U" el 2010, explicó que ante los canarios "volvimos a no tener eficacia en nuestra área, nos convirtieron tres goles y nos llegaron por momentos con cierta facilidad. Mejoramos al menos en la fase ofensiva, convirtiendo dos goles, pero después en lo que tiene que ver con el trámite del partido, tenemos que corregir varios aspectos, uno de ellos es hacer una mejor lectura de lo que pide el encuentro y adaptarnos más rápidamente al rival".

Oponente estudiado

A solo un par de horas de su primer partido vistiendo el buzo de Everton en Sausalito, Larriera confirmó que tienen más que estudiados a sus oponentes de hoy. "Hemos trabajado sobre sus fortalezas y debilidades, creo que va a ser un partido de muchos duelos, y hay que ganarlos, así como también trataremos de ganar la posesión de la pelota buscando generar algunos circuitos, de los que algo ya se vieron (frente a San Luis). Universidad de Chile tiene un juego camaleónico, cambia de sistema, estructura y futbolistas según la ocasión, y eso los hace impredecibles", sostuvo.

El charrúa prefirió no adelantar detalles de lo que será la formación que parará hoy, aunque sí indicó que algunos jugadores lesionados podrían reaparecer. "Es probable que tengamos disponibles a un par de futbolistas más que no estaban en el último partido", cerró.

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A siete años de lo que fue su última aventura en Chile, cuando dirigió sin éxito a O'Higgins, Mauricio Larriera dio cuenta de un par de normativas que no le gustan de nuestra liga. "No entiendo, porque no pasa en otras ligas, que el plantel para este partido es de 18 futbolistas y los cambios siguen siendo cinco. Eso no nos permite mayor margen de maniobra, en otros países hay 20 o 21 jugadores (en la banca)". A juicio del uruguayo, esto atenta, por ejemplo, con la obligación de hacer jugar a futbolistas sub 21, ya que "no se nos da la oportunidad de colocar a quizás dos chicos más para poder elegir, y que no solo los pongamos para cumplir la normativa y después sacarlos".

Santiago Wanderers realizó ayer el lanzamiento de la versión 2025 de su ya tradicional programa llamado "tutoría caturra", el cual realiza junto con la Universidad Andrés Bello buscando que los cadetes de la institución terminen de buena forma su enseñanza media, a través de clases con horarios que se adaptan a los entrenamientos y competencias que disputan los canteranos verdes.

Dentro de la camada de jóvenes futbolistas que serán parte de esta iniciativa durante este año, destaca Giuliano Luna, hijo de Jorge Luna, quien se unió a los cadetes porteños a comienzos de año, una vez que su padre firmó su regreso al club. El hijo del "Semi" juega actualmente en la categoría sub 17 del Decano y tal como su padre, se desempeña como volante creativo.

En calidad de apoderado, el exCopiapó acompañó a su retoño al inicio del programa y contó que "me ha tocado estar en otros lados y es complicado para los chicos el tema del deporte y los estudios. Esto me parece maravilloso, porque se imparte un aprendizaje en pos del deporte, porque los niños hoy entran a un plantel a muy corta edad".