Persisten las denuncias por abandono estatal a casi un año del 2F
Damnificados del megaincendio rechazan las soluciones del Gobierno y confirman inicio de una huelga de hambre para esta semana.
Valentina Vilches Menares - La Estrella de Valparaíso
Acasi un año del devastador megaincendio que afectó a las comunas de Viña del May Quilpué y que dejó a 137 personas fallecisdas, los damnificados siguen esperando soluciones concretas mientras reiteran que el Estado los ha abandonado sin brindarles respuestas claras.
Este lunes 27 de enero, dirigentes de diversas organizaciones sociales, encabezados por la ONG Sobrevivientes, realizaron una manifestación que comenzó frente al Congreso y culminó en el edificio del Gobierno Regional, reiterando la falta de soluciones reales por parte del gobierno.
La manifestación sirvió como un recordatorio de que las promesas de reconstrucción aún no se cumplen, y la frustración sigue aumentando.
"Rechazamos absolutamente que se termine el bono de acogida, porque las viviendas definitivas no han llegado y estamos lejos de tener una solución habitacional digna", afirmó Jaime Mella, vicepresidente de la ONG Sobrevivientes. A la fecha explica que solo se han entregado 20 de las más de 5.800 viviendas prometidas, una cifra que calificó de "irrisoria y patética".
Las organizaciones exigen que las ayudas no sean condicionadas ni discriminatorias. Tiare Olivares, una de las dirigentes señaló: "El fuego no distinguió entre propietarios, arrendatarios o familias en campamentos. Pero las autoridades sí lo hacen, dividiendo a las víctimas de manera arbitraria".
Este punto fue reiterado por Amanda Guerra, presidenta de la ONG Sobrevivientes, quien cuestionó: "Nos quemaron a todos juntos, ¿por qué ahora nos dividen y nos tratan como si unos valieran más que otros?".
Ante la que acusan como indiferencia de las autoridades, los dirigentes confirmaron que una huelga de hambre será llevada a cabo esta semana. "Es una decisión dolorosa, pero necesaria. Somos más de 60 dirigentes que estamos tomando medidas radicales para ser escuchados", aseguró Guerra.
Sin embargo, el grupo se reservó los detalles de cuándo y dónde comenzará esta medida de presión, explicando que esperan que las autoridades nacionales, incluido el Presidente Gabriel Boric, respondan directamente a sus demandas.
La indignación de los dirigentes también apunta al ministro de Vivienda, Carlos Montes, a quien acusan de incumplir sus compromisos y de no dar la cara ante la crisis.
"Le hemos enviado cuatro oficios, solicitado reuniones y hemos sido ignorados. Si no puede cumplir su rol, debería renunciar", expresó el vicepresidente de la ONG.
Las organizaciones reiteraron su exigencia de un bono universal e indefinido para todos los afectados hasta que las viviendas prometidas sean entregadas.
"No pedimos privilegios, pedimos dignidad. Que se cumpla con la Ley 21.681, que establece recursos para la reconstrucción habitacional y la recuperación económica", insistió Guerra.
Los manifestantes exigieron a las autoridades actuar con humanidad y acelerar las soluciones, dejando claro que están luchando por un derecho, no un favor. Sin embargo, a pesar de sus insistencias y de mantenerse en el frontis del parlamento y luego en el Gobierno Regional, ninguna autoridad salió a conversar con ellos, lo que reafirmó la sensación de abandono y de ser víctimas del propio Estado.