Tengo 79 años y uso habitualmente la locomoción colectiva. Pago debidamente mi tarifa y tengo por costumbre saludar y despedirme del conductor. Por lo mismo, me choca enormemente el mal trato que debemos tolerar los pasajeros, en mi caso particular, pasajera adulta mayor, de algunos choferes que simplemente no entienden que prestan un servicio.
El miércoles recién pasado, aproximadamente a las 15.30 horas, tomé el bus del recorrido 204 para dirigirme al centro de Viña del Mar. Al pagar mi pasaje y dado que no me lo dio, le pedí al chofer que me diera el boleto. Ante mi sorpresa me preguntó para qué lo quería. Ante mi silencio dado que es lo que corresponde a los pasajeros, me dijo de manera irónica: "Tome, para el sorteo".
El señor probablemente no es chofer profesional y mucho menos tendrá madre, tía, abuela, hermana, esposa. Ningún respeto ante una exigencia que por lo demás es un derecho del pasajero y un deber del conductor proporcionar.
El "educado" conductor manejaba el bus 204 patente JSBC 51, número de Orden 95.
M. Ll.M.