Crisis en el Van Buren: oftalmólogos suspenden servicios y jefe renuncia
Desde el Colmed dijeron que medida responde a falta de insumos y de personal: 11 profesionales para enfrentar lista de espera de 4.600 pacientes.
Falta de infraestructura, condiciones laborales inadecuadas y deficiencias en la gestión administrativa. Estas fueron las tres razones que llevaron al equipo de la Unidad Oftalmológica del Hospital Carlos van Buren de Valparaíso a suspender sus funciones a partir de esta semana.
Lo anterior está fundado, explicaron desde el Colegio Médico de Valparaíso, en el hecho de que "desde un tiempo a esta parte existe un creciente deterioro de las condiciones de trabajo de los profesionales de la especialidad y una crítica falta de recursos mínimos para entregar una atención de calidad".
Esto, en particular, por "la falta de adquisición y renovación de equipamiento crítico, la carencia de insumos esenciales para la realización de procedimientos básicos de la especialidad y la casi nula disponibilidad de quirófanos, que se ha visto agravada por la crisis económica que vive el hospital".
A esto se suma la escasez de respuestas satisfactorias, como también la falta de cambios sustanciales en las condiciones de la unidad por "parte de las autoridades", cuestión que ha ocasionado "el término de las relaciones contractuales de muchos médicos oftalmólogos a través del tiempo".
Solo 11 profesionales
Sin perjuicio de lo anterior, el punto más crítico estaría, a juicio del Colmed, en las condiciones laborales inadecuadas.
"El personal médico ha estado trabajando incesantemente en reducir las listas de espera en consulta y cirugías, sin embargo, con la cantidad de pacientes en espera -más de 4.600- y sólo con 11 especialistas, la mayoría de ellos con contratos por 11 horas semanales, con equipamiento obsoleto o en malas condiciones, y con los incumplimientos de las garantías GES, ha generado un desgaste en el equipo profesional", declararon desde la asociación.
Producto de ello, "el jefe de la unidad ha decidido dejar su cargo", situación que "sin duda agrava la crisis, dificultando la atención integral de los pacientes".
Para el doctor Ignacio de La Torre, presidente local del Colmed, "los colegas no quieren comprometer la salud de la población y mucho menos realizar cirugías en condiciones que no sean seguras".
Ya que, continuó, "oftalmología es una especialidad que requiere un equipamiento de alta fidelidad, porque las cirugías del ojo no pueden ser realizadas con equipos que no cumplan con los estándares técnicos y hoy día, los equipos que habían sido comprometidos hace más de dos años para que esta especialidad pueda desarrollarse con normalidad en el hospital, lamentablemente, el financiamiento desde el ministerio de Salud llegó, pero fue destinado para otros fines desde el Servicio".
Análisis que compartió uno de los funcionarios de la unidad, quien prefirió proteger su identidad.
"No hay personal y el equipamiento está obsoleto. En algún momento, por ejemplo, suspendieron cirugías porque no había dónde sentarse durante la operación. Hoy por hoy, está viniendo un solo oftalmólogo para apoyar al alumno becado de esta especialidad, pero nada más", comentó.