Camila Rojas Vargas - La Estrella de Valparaíso

Finalmente Maná concretó su quinta presentación en el Festival de Viña del Mar, esto luego de que el año pasado se vieron obligados a cancelar su paso por Chile debido a que el cantante del grupo sufriera una lesión en la rodilla de la que todavía no se había recuperado hasta la a fecha de suspensión 13 días antes de subirse a la Quinta Vergara.

Tras 11 años de ausencia en el certamen el grupo mexicano revivió el romanticismo en el anfiteatro conquistando al monstruo de principio a fin. El show fue dedicado a los voluntarios de bomberos que prestaron labores relacionadas a los incendios.

"Este show se lo dedicamos a todos los bomberos que trabajaron aquí en Viña del Mar. Nuestro respeto y nuestra admiración para ellos", dijo Fher Olvera, el vocalista del grupo tras recibir la Gaviota de Plata. Poco después el público pidió a gritos la Gaviota de Oro para el conjunto mexicano, cuyos orígenes se remontan a la ciudad de Guadalajara bajo el nombre de Sombrero Verde en 1986.

En cerca de dos horas el grupo hizo un repaso por su discografía seleccionando temas románticos clásicos del pop rock latinoamericano. Comenzaron con "Oye mi amor" (1992) y continuaron con "De pies a cabeza" (2016), "Labios compartidos" (2006), "Vivir sin aire" (1992) y "Bendita tu luz" (2006).

La presentación tuvo momentos que hicieron reír al público ya que Fher interactuó bastante, tomó una bandera chilena que abrazó y besó, tomó un shot de tequila alentado por toda la Quinta Vergara. "Salucita por todos nuestros hermanos chilenos", indicó el vocalista. También recordó algunas historias sobre antiguas novias, "esta se la dediqué a una mexicana que me estaba poniendo el cuerno", contó antes de interpretar "Mariposa traicionera" (2002), así también con "Te lloré todo un río" (2002) la cual iba dirigida hace muchos años a "otra chava que me puso otro cuerno con otro güey" en la universidad con un hombre a quien le llamaban Piolín, como la caricatura.

"Este güey estaba bien presupuestado, tenía un Mustang azul de poca madre convertible, yo tenía una bicicleta jodida (...) entre los chismes de los cuates me dijeron que un día lo vieron en el baño a "El Piolín" y que cuando estaban haciendo pipí, voltearon así y este güey sí estaba bien piolincito", fue la historia que desató risas.

De igual manera la emoción afloró en el monstruo y en los usuarios de redes sociales que comentaban la transmisión del Festival cuando Heidi, una fanática, subió al escenario con una petición especial para la banda.

"Mi padre murió hace 3 años, me ha hecho falta y nunca pensé que iba a cantar "Reloj cucú", dijo ella en la tarima. Ambos lanzaron un beso al cielo y él interpretó la canción que dice entre sus letras "oye, cucú, papá se fue, prende la luz que tengo miedo, oye cucú, papá se fue prende la luz y apaga el tiempo". Luego Fher cantó "Eres mi religión", canción que dijo"espero se la dediques a otro hombre". La Quinta fue un karaoke durante toda la presentación.

"En cerca de dos horas el conjunto hizo un repaso por su discografía seleccionando los clásicos románticos