Lamentable: vecinos de Miraflores deben hacer rondas para evitar robos
Solicitan mayor presencia policial para resguardar lo poco que quedó tras el incendio.
Fabian Cerna Mendoza - La Estrella de Valparaíso
Una lamentable situación que se ha hecho común entre los damnificados por los incendios en la Región de Valparaíso se repite en los distinos sectores, fundamentalmente en las comunas de Viña del Mar y Quilpué.
En la primera comuna, en particular en el sector Las Pataguas en Miraflores Alto, los vecinos deben organizarse para evitar los robos y los recurrentes intentos por volver a encender el fuego en la zona.
Cristián Tello, vecino del sector desde hace más de 15 años, señala que la mayoría de los vecinos optó por quedarse cuidando sus terrenos en carpas, ya que en la primera noche después del incendio, hubo gente prendiendo fuego en diversos puntos, pero que los responsables detenidos han sido liberados por falta de pruebas contundentes.
"La gente está alerta de que no venga gente de otro sector. Nosotros nos conocemos, muchos años viviendo aquí y somos las mismas casas de siempre. Entonces ver a una persona extraña en el sector, para nosotros es sospechoso por lo que tratamos de investigar la procedencia del individuo, por si es conocido de alguien o un familiar que se está quedando aquí", indicó.
Además, señala que los vecinos se han resguardado haciendo cuadrillas nocturnas, a la espera de que la ayuda municipal llegue pronto. "Aquí falta mucha ayuda, al igual que en otros lugares", expresó.
Los vecinos del sector siguen denunciando que la única ayuda que se ha manifestado proviene netamente de gente anónima que ha llegado de otros sectores, juntas de vecinos de otros lados y voluntarios que ayudan a la gente a remover los escombro, en hacer almuerzos, traer ropa y útiles de aseo.
"Ayer recién llegaron los baños químicos que harta falta que hacían. Pero ya deberían haberlos limpiado porque ya están colapsados. Somos más de 200 vecinos para un solo baño".
Voluntarios
Cientos de voluntarios trabajan arduamente levantando latas, cerámicas y escombros voluminosos. Una difícil tarea porque los caminos del sector no están bien estructurados, y los voluntarios deben ir con apoyo para subir carretillas para que no caigan por el precipicio.
Sólo tienen lentes protectores, mascarilla y bloqueador. Los zapatos de seguridad corren por cuenta propia
Cientos de jóvenes han estado ayudando, en ocasiones, toda una mañana en una casa sacando escombros.
A la espera de la ayuda municipal, los vecinos y vecinas siguen cooperando entre sí para tratar de hacer frente a la crisis. J"