Escritor porteño rememora la ciudad en la misma luz y el viento
El laureado Manuel Peña Muñoz, autor de numerosas crónicas sobre la ciudad puerto recuerda como era y ha evolucionado esta ciudad.
Por Juan Guillermo Prado O.
Es difícil en una crónica periodística enumerar cuántos premios y galardones ha recibido el escritor y profesor porteño Manuel Peña Muñoz, quien entre otros reconocimientos es Premio Municipal de Literatura de Valparaíso en 1997 y el año pasado recibió el Premio "Artista de Trayectoria", del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, entre otros.
En sus crónicas, Joaquín Edwards Bello, escribió: "Confieso que yo empecé a conocer la poesía y la belleza de mi ciudad natal después de haber salido a correr mundos. Antes de eso, mi sueño dorado de niño era salir de Valparaíso".
¿Ha recibido alguna influencia literaria de este autor?
Sí, su novela "Valparaíso, la ciudad del viento" fue un libro que me marcó por la mirada nostálgica que tiene el autor sobre su ciudad natal, recordándola tal como era en su infancia. De ella rescata sus particularidades: la neblina del otoño, el olor a café tostado, la lluvia de cenizas en verano, las tiendas elegantes, los salones de té, las familias inglesas. Llega a decir que Valparaíso es "la patria de los buenos detalles". Heredé de este autor su poder de observación y evocación.
En las crónicas de su libro "Ayer soñé con Valparaíso", ¿qué temas son significativos?
Ese es un libro que reúne las crónicas porteñas publicadas en distintos medios de prensa, entre ellos "El Mercurio" de Santiago. En ellas aparece el registro de todo lo que observé en mi ciudad natal a través del tiempo: historia de las tiendas, cines, teatros, cafés, plazas, miradores y escalinatas. Aquí están reflejados todos los paseos que hice por la ciudad y las personas que conocí en esos recorridos. Quise que el libro fuera una guía personal para que cada lector recordara y apreciara la ciudad en sus pequeños detalles y en lo que la hace distinta de otras.
Este libro tiene seis ediciones, la última revisada y ampliada con nuevas crónicas fue en el 2014 para conmemorar los 15 años de su primera edición. El libro inauguró la Biblioteca Valparaíso de RIL editores dedicada a difundir libros sobre la ciudad patrimonial.
En su libro "Valparaíso, la ciudad de mis fantasmas" ¿qué es lo que más recuerda?
El texto "Valparaíso, la ciudad de mis fantasmas" es un libro de memorias que recoge impresiones y recuerdos de mi vida en el puerto, entre 1951 y 1971, es decir hasta los 21 años. Lo que más recuerdo es la vida entre las familias españolas que vivían en la ciudad, con sus tiendas como la de mi padre, Peña Hermanos, en la calle Independencia, que muchos porteños recuerdan.
Era una ciudad cosmopolita en la que confluían españoles, ingleses, italianos, alemanes, franceses y árabes, entre otras nacionalidades. Cada familia tenía su impronta que se reflejaba en la arquitectura, comidas, acentos y en ciertas formas de vida. Este libro tiene una segunda parte titulada "Si la memoria no me engaña" con nuevos recuerdos de Valparaíso y viajes diversos entre 1971 y 1991.
¿Está presente Valparaíso en otros de sus libros?
Sí, en mi novela "El niño del pasaje" que logró el Premio del Círculo de Críticos de Arte de Valparaíso, en 1989, imaginé la infancia de Leonardo Wilson, un niño porteño en un pasaje del cerro de la Concepción. Mi novela "Mágico sur" recrea el ambiente de las familias españolas en Valparaíso en la primera mitad del siglo XX. Esta novela obtuvo el Premio Gran Angular de ediciones SM en Madrid y dio a conocer Valparaíso en España.
En el año 2009 escribí "El sendero bicentenario" para la Fundación Valparaíso con sugerencias de recorridos patrimoniales por la ciudad. Con la investigadora Fernanda Casorzo escribimos "Valparaíso, secretos de la ciudad del viento" en el que narramos lo que cuentan los porteños, lo que saben y no revelan. Son esas pequeñas historias que deberían saber también todos los que visitan la ciudad.
¿Cómo ha cambiado el puerto que conoció en su infancia y juventud con la situación actual?
Ha cambiado totalmente, casi no lo reconozco pues han cambiado los puntos de referencia que yo tenía cuando vivía allá, como los negocios, los ascensores, los cafés, los cines y teatros. La ciudad ha sido reemplazada por otra en el mismo lugar de la anterior. Sin embargo, la sigo reconociendo en la misma luz y el viento.
1951 a 1971. Son los años de recuerdos que recoge "Valparaíso, la ciudad de mis fantasmas" deManuel Peña Muñoz.