Ver la foto de la cara sonriente de un niño, junto a su mascota, o la de un abuelo orgulloso de sus años junto a los que lo quieren tanto, o la última foto junto a un familiar que ya no está, y podría seguir, en la sección "Nuestras estrellas" de La Estrella de Valparaíso, es el mejor ejemplo de la cercanía que sienten los porteños de corazón verde con La Estrella de Valparaíso, mejor dicho con "Su Estrella", que a lo largo de generaciones y generaciones los ha acompañado en las duras y las maduras, durante los últimos 103 años, haciéndose parte de sus alegrías y también de sus penas, poniendo más que un grado de arena, para ayudarlos a salir adelante, con lenguaje muy inclusivo y cercano, tal vez contando las mismas noticias que cuenta la competencia, pero a la manera tan propia y arraigada que tiene La Estrella de Valparaíso, característica que sus fieles lectores destacan y de sobremanera agradecen...

Señora Marcela muchas felicitaciones para usted y por su intermedio a todos quienes tienen la labor de darle vida todos los días a La Estrella de Valparaíso, administrativos y profesionales, en todas las plataformas, y por su puesto en su versión papel...

Señora Marcela quiero agradecerle a usted y a quienes corresponda, el que mis opiniones tengan un lugar en las páginas de La Estrella de Valparaíso, sinceramente muchas gracias a todos...

"Una Estrella es siempre una Estrella, no importa en qué fase de su vida estén"

Rascheed Ogunlaru (1970) Líder motivacional inglés, con raíces nigerianas...

Le saluda muy afectuosamente

Luis Enrique Soler Milla

Al finalizar un año más y comenzar uno nuevo, los países, organizaciones y seres humanos, efectúan normalmente un balance de lo hecho, como medio para saber que se ha logrado y sobre ello, proyectarse al futuro que nos ofrece otros 365 días plenos de expectativas, si estamos dispuestos a enfrentarlas y tratar de cumplirlas.

Como es lógico, el grado del cumplimiento de metas del año que finaliza, varía según se las interprete y como tenemos la costumbre de autoproclamarnos siempre ganadores, algo que es parte de la naturaleza humana, se torna muy difícil establecerlas claramente.

Ahora bien, algo que parece olvidarse en el ámbito de nuestra sociedad, es que el año que finaliza puede haber sido bueno, regular o malo, algo que en el fondo no tiene mayor importancia, ya que a partir del inicio del nuevo, lo que necesitamos es que éste sea mejor.

No olvide que ello es una necesidad, si queremos progresar de cara al futuro, en el marco que nos da el bien común.

Antonio Yakcich Furche

Historiador