Francisca Palma Schiller

El pasado 20 de diciembre, un estudio levantado por la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile señalaba que las ventas presenciales del comercio minorista de las regiones de Valparaíso, Biobío y La Araucanía, según el índice que elabora mensualmente la CNC, marcaron resultados negativos en el mes de octubre, con bajas mayores a las registradas en septiembre, acumulando así dieciocho meses de caídas anuales.

En lo particular, en la Región de Valparaíso las ventas reales del comercio minorista cayeron un 10,2% real anual en octubre, alcanzando así, entre enero y octubre, una baja real de 10,5%.

Con estas desalentadoras cifras sobre la mesa, surgió la duda sobre si la Navidad logró darle ese esperado y necesario espaldarazo al comercio de la zona... o no.

"Según cifras preliminares de la Cámara de Comercio Minorista, las ventas cayeron en un 2,8% si se compara con el 2022", nos indica Carlos Vidal, economista y académico de la Universidad de Valparaíso (UV).

"La tendencia -de ventas- venía al alza respecto de estos últimos años, que habían estado deprimidas, pero más bajas que lo que era previo a la pandemia. Esto se va a mantener porque la situación económica está incidiendo: los niveles de ingresos van a la par con los niveles de producción y la economía ha estado deprimida y se va a seguir manteniendo deprimida", explica el experto.

Y agrega: "A eso debemos sumarle el hecho de que las tasas de interés están altas y, por lo tanto, la gente no se está endeudando o por lo menos no se está endeudando a los niveles que lo hacía antiguamente, lo que me parece bien, desde la óptica de la prudencia, pero mal desde la óptica de que el consumo es uno de los dinamizadores de la actividad económica".

Factores extra

Junto a una economía deprimida, hay que agregar otros factores, tales como la delincuencia y el comercio informal, puntos con los que coincide el gremio porteño.

"Efectivamente el comercio informal complica al comercio establecido, porque aquí hay mafias detrás y no solo alimenta una actividad ilegal, porque no paga impuestos, sueldos dependientes e imposiciones, sino que hace una competencia desleal", precisa el docente.

¿Cómo se visualiza el 2024? Vidal es claro: "Yo creo que la reactivación, si es que se da, se va a dar con más fuerza el 2025".

"Esta condición se mantendrá para el 2024, no creo que haya grandes cambios. La tendencia va a seguir un poco al alza, pero no en los niveles que teníamos previo a la pandemia. Si tú recorres el centro de Valparaíso, te vas a dar cuenta de que hay muchos locales que están cerrados", observa.

Notoria caída

Héctor Arancibia, presidente de Comercio Unido de Valparaíso y dueño del local de calle Condell, Anaís, señala: "Podríamos dar un balance estimativo de cómo estuvo todo: no fue bueno, hubo una caída en las ventas notoria por diversos factores", señala respecto a las ventas previas a la Navidad, que tradicionalmente han sido, junto al Día de la Madre, las mejores fechas para el comercio detallista.

"El principal factor para las bajas ventas es la delincuencia que hemos tenido durante todo este año y que ha hecho que los locales tengan que cerrar más temprano, porque la gente se retira más temprano. Está también el aumento del comercio ilegal, donde existió chipe libre para estas fechas. Todos esos factores atentaron contra las ventas del comercio establecido", contextualiza el locatario porteño.

A lo anterior, agrega Arancibia, el calendario les jugó una mala pasada.

"Para mala suerte nuestra, los principales días, que son 23 y 24 de diciembre, cayeron días de fin de semana, justo sábado y domingo, y eso implica automáticamente una baja en las ventas", lamenta.

Considerando los factores mencionados, "las diferencias fueron abismantes". "Yo, por ejemplo, a tono personal, pero que se puede extrapolar a otros locales, el puro día 24 tuve una caída de un 70% en las ventas y el día 23 una caída del 40%. Eso te puede graficar cómo se comportó el comercio durante esta fecha", ejemplifica.