Iván Martínez Funerarias: el servicio mortuorio en 360°
Tras seguir los pasos de su abuela, hoy es el dueño de uno de los servicios de funerarias más importante en Chile. Su cartera va desde cementerio hasta prestaciones fúnebres, apoyo legal, psicológico y acompañamiento en el duelo.
Guillermo Ávila Nieves - La Estrella de Valparaíso
Para algunos, Iván Martínez es de aquellos seres de luz entre las tinieblas: de esos que seguramente conoce mejor que nadie la intensidad de nuestra tristeza cuando se apaga la vida de un ser querido.
De algún modo, su oficio es del que nos pone el espejo de nuestro futuro ante los ojos. El que se codea con la muerte a diario porque ese es su negocio. Allí, en el terreno de quienes maquillan, recomponen y velan a personas que ya no son, la Funeraria Iván Martínez se ha ganado un prestigio, y una porción de mercado, que a hoy marca pauta, liderazgo y originalidad en Chile.
Homenaje al cielo
"La diferencia de nuestra funeraria es que me representa, es decir hace cosas diferentes al resto, innovadoras, con marketing, además de la constancia en mi emprendimiento" revela el dueño de Iván Martínez Funerarias, oriundo de la comuna de Puente Alto, quien a pesar de no portar títulos ni diplomas de casas de estudios, se graduó con honores de la universidad más difícil: la de la calle.
"Me gusta empaparme de conocimiento de lo que quiero aprender y saber".
Hoy el "Gatito" es un empresario reconocido en su campo. "Los logros, premios y medallas recibidas se han generado muy natural. A nivel nacional, somos la empresa más grande del rubro funerario", asegura sin medias tintas.
Cuenta que en la Región de Valparaíso tienen un convenio desde hace cinco años y que recién acaban de renovar. "Somos administradores y gestores de los servicios de La Marina", desliza orgulloso como representante de la funeraria Naval bajo el paraguas de la Martínez.
Si hay un tema complejo donde se maneja es en el duelo. Pero, ¿cómo este tipo de empresas pueden generar esa ayuda del preocuparse por el cliente? Responde que posterior al funeral, monetariamente hablando, la ganancia pasa a ser de otro tipo. "Quien llega a cotizar el servicio funerario se transforma en cliente, luego pasa a ser paciente a través de nuestra Unidad de Duelo, para ser nuestro representante como empresa".
Con ese encanto, dice que atienden entre las regiones Metropolitana y la de Valparaíso, a 800 terapias en forma individual y grupal, con 12 sicólogos que laboran en lo que reitera su Unidad de Duelo.
Proyectos de muerte
Desde agosto pasado, la carroza eléctrica es uno de ellos. Va en la línea eco sustentable con generación eléctrica. "Me decanté por instituciones con pocas posibilidades de desarrollar estos emprendimientos". Así, dotado de labia, hizo charla motivacional a un establecimiento municipal industrial. Luego, hizo clic con un profesor del Duoc UC en la carrera de ingeniería mecánica, en electromovilidad.
Sin más, se la jugó por financiar algo que contara con la participación conjunta entre estudiantes de la Escuela Técnica de Puente Alto, profesores del Duoc y su funeraria. ¿Resultado? Carroza eléctrica no contaminante.
De niño, si había algo que lo eclipsaba, aparte de la muerte, eran las motos. Así, vio la idea de aunar sus dos pasiones: los funerales y el mundo tuerca, de "tratar a los motoqueros que tuvieran accidentes". Y con ello, al socio estratégico: un artesano fanático de las motocicletas que labraba el fierro como nadie. Así nació el proyecto del carro fúnebre Harley-Davidson, enfocado para el segmento motoquero: "Tenemos la única moto Harley carroza en el país. Lo acabamos de terminar en diciembre. Es innovador, un gran trofeo".
Dentro de lo último, otra temática diferenciadora es la canoterapia, o la Terapia Asistida con Perros (TAP), para la contención en el adiós. O el arte de incorporar estas mascotas (incluso con conejos) a sesiones para beneficiarse de su presencia y vínculo como elemento reforzador. "Juntamos pacientes del duelo para que interactúen con los animalitos. También cuando estamos velando". Como accionistas del cementerio Valles Unidos, en Quilicura, en sus instalaciones realizan la recepción, "con los perritos para ayudar emocionalmente a los deudos".
Recalca que, "todo lo que es Unidad de Duelo es de forma gratuita". Iván cuenta que vive solo, entre Lo Barnechea y Concón, en Viña del Mar, por negocios, pero con su Puente Alto natal en el alma. Reconoce que lidera un negocio "especial, complejo". Que resulta sensible, "en el peor momento de una familia, pero tratamos de estar con ellos desde el cariño".
En noviembre acabó de concretar una presentación que promete no dejar indiferente: la elaboración de diamantes hechos con las cenizas de ADN del ser querido. Aún más, la confección de los cristales se realiza en Reino Unido. Ahora planea posicionar su negocio con alguna franquicia o socio estratégico. Traspasar la frontera. "Estamos viendo oportunidades en la primera línea de países en Sudamérica para expandir el negocio". Como en el cielo: "No tengo límites".