Marcelo Macellari - La Estrella de Valparaíso

En una ocasión le preguntaron a Orson Welles, realizador de "Ciudadano Kane", considerada por muchos críticos la mejor película de la historia del cine, cuáles eran sus tres directores favoritos. Welles respondió: John Ford, John Ford y John Ford. Y a casi 9 mil kilómetros de Hollywood, en una bodega de Santiago de Chile y a punto de irse a la basura, el director del Festival de Cine Recobrado de Valparaíso, Jaime Córdova, rescató tres rollos de una película muda de Ford, "La gota de sangre" (The scarlet drop, 1918), de la cual hasta ahora sobrevivían poco más de 30 minutos en el archivo privado de Getty Images en Los Angeles. La copia que se encontró en la capital, con 40 minutos de metraje, será restaurada en la Cineteca Nacional y exhibida en la versión 2024 del certamen porteño.

Sobre el hallazgo, Jaime Córdova cuenta que "un coleccionista, que reunió muchas películas entre los años 30 y 40, falleció y por rebote muchas de estas cintas llegaron a una bodega en Providencia, donde las iban a tirar a la basura. De ahí surge un llamado telefónico para rescatar ese material, en el que había cintas norteamericanas, alemanas y francesas, de las décadas de 1910 y 1920. En ese lote había tres rollos, sin título, donde se puede identificar al actor Harry Carey, habitual de John Ford, y también las temáticas y el estilo visual característico de este director, como el detenerse en el umbral de la puerta, como recordamos del inicio y el final de 'Con más corazón que odio', que aquí también se aprecia. Además aparece la figura de Abraham Lincoln, muy querido para el cineasta y al que retrató también en una película biográfica. Por otra parte, los personajes de Ford siempre se encuentran en los cementerios y la película termina con una escena en un camposanto. Por eso, no había títulos, pero sí estaba Harry Carey y estos elementos tan particulares del cine de John Ford, y por suerte, en los intertítulos de la película que se conservaban, venían los nombres originales de los personajes en inglés. Gracias a eso pude identificar la película".

En "La gota de sangre" Harry Carey interpreta a un hombre que tras rechazar luchar en la guerra de secesión norteamericana, se une a una banda de forajidos. Completan el reparto Molly Malone, Vester Pegg y Betty Schade.

"La copia que tenemos dura 10 minutos más de la que existe hoy en el archivo de Getty Images -detalla Córdova-, la cual no está a disposición del público. Son 40 minutos de película y, como era habitual en la época, está teñida de colores verdes, azules y tonos sepias. Además los intertítulos están en castellano. La idea es poder restaurarla durante este verano en la Cineteca Nacional y poder estrenarla el próximo año en la inauguración de la versión número 28 del Festival de Cine Recobrado de Valparaíso, como una primicia internacional, porque esta película no se proyecta desde 1918, es decir hace 105 años".

Hallazgo mundial

Por ello, el académico del Duoc UC y de la Universidad Viña del Mar señala que "se trata de un hallazgo de importancia mundial. Si un John Ford está extraviado, encontrarlo es muy importante, porque la gran mayoría de su filmografía muda, que va desde 1917 a 1929, está perdida, porque los estudios cinematográficos de la Universal y la Fox, donde él realizó estas películas, se incendiaron en los años 30 y 40, y ese material se perdió. Se han encontrado algunas películas de Ford en Francia, con otros títulos, por eso ha sido tan difícil identificarlas".

El director del certamen porteño, cuya versión número 27 se celebrará entre el 23 y 28 de octubre próximo, dice que "sin la figura de John Ford sería muy difícil comprender la evolución y la historia del cine. Es un director tan importante como Griffith, Eisenstein o Welles. Las imágenes que tiene 'La gota de sangre' las vamos a ver en los western que él va a realizar en los años 30, 40 y 50. John Ford ya es John Ford en 1918. Ya tiene su estilo visual, sus temáticas y los personajes que pueblan sus películas".

En cuanto a la restauración, Córdova explica que "el proceso de restauración va a ser más o menos largo y meticuloso, porque la película, al parecer, fue muy popular en su época y muy exhibida, y trae algunos deterioros y varias pegaduras, así que tendrá que escanearse fotograma por fotograma para poder conservar los colores de los teñidos originales y ojalá en 4K, para conservar la calidad de la película, filmada en nitrato. Ese archivo queremos compartirlo y motivar a algunas instituciones internacionales para que se interesen en hacer una restauración en mejor calidad y que la película pueda difundirse en muchas partes del mundo".