INGREDIENTES

-2 pechugas de pollo

-Sal y pimienta al gusto

-1/2 taza de harina

-2 huevos

-1 taza de pan rallado

-1/2 taza de queso parmesano rallado

-Aceite de oliva

-2 tazas de salsa de tomate (puede ser una salsa comprada en el supermercado)

-200 g de spaguetti

-Perejil fresco picado (opcional, para decorar)

PREPARACIÓN

Cocina los espaguetis siguiendo las instrucciones del paquete en agua con sal. Escúrrelos y resérvalos.

Prepara una estación de empanado con tres platos: uno con harina, otro con los huevos batidos y un tercero con una mezcla de pan rallado y queso parmesano.

Limpia y sazona las pechugas de pollo con sal y pimienta al gusto.

Pasa cada pechuga de pollo primero por la harina, luego por los huevos batidos y finalmente por la mezcla de pan rallado y queso parmesano, asegurándote de que queden bien cubiertas.

Calienta aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Fríe las pechugas de pollo empanadas hasta que estén doradas y cocidas por dentro, aproximadamente 4-5 minutos por cada lado. Escúrrelas sobre papel absorbente.

En una cacerola, calienta la salsa de tomate a fuego medio hasta que esté caliente.

Precalienta el horno a 180°C.

Coloca las pechugas de pollo en una bandeja para hornear y cubre cada una con un poco de salsa de tomate. Luego, espolvorea un poco más de queso parmesano rallado sobre cada pechuga.

Hornea las pechugas de pollo durante unos 10 minutos, o hasta que el queso se haya derretido y esté burbujeante.

Sirve las pechugas de pollo sobre los espaguetis cocidos y calientes. Puedes agregar más salsa de tomate sobre los espaguetis si lo deseas.

Decora con perejil fresco picado y sirve caliente.

INGREDIENTES

-1 taza de arroz Arborio (u otro arroz para risotto)

-200 g de champiñones, cortados en rodajas

-1 cebolla, finamente picada

-2 dientes de ajo, picados

-1/2 taza de vino blanco seco

-1,5 litros de caldo de pollo o vegetales

-50 g de mantequilla

-1/2 taza de queso parmesano rallado

-Aceite de oliva

-Sal y pimienta al gusto

-Perejil fresco picado

PREPARACIÓN

Calienta el caldo en una olla y mantenlo caliente a fuego bajo.

En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y 1 cucharada de mantequilla. Agrega la cebolla y el ajo, y cocina hasta que estén dorados y fragantes.

Añade el arroz y revuelve para que se impregne con la grasa. Luego agrega el vino blanco y cocina hasta que se haya evaporado.

Comienza a agregar el caldo caliente, una cucharón a la vez, revolviendo constantemente y esperando a que el líquido se absorba antes de agregar más caldo. Continúa este proceso hasta que el arroz esté cremoso y cocido al dente, esto tomará alrededor de 18-20 minutos.

En otra sartén, saltea los champiñones en mantequilla hasta que estén dorados y tiernos.

Cuando el arroz esté listo, retira del fuego y agrega los champiñones salteados, el queso parmesano y la mantequilla restante. Revuelve bien y sazona con sal y pimienta al gusto.

Sirve el risotto caliente, espolvorea con perejil fresco picado y un poco más de queso parmesano si lo deseas.

INGREDIENTES

-250 g de spaghetti

-150 g de panceta o tocino

-3 huevos

-100 g de queso parmesano rallado

-Pimienta negra al gusto

-Sal al gusto

-Aceite de oliva

PREPARACIÓN

Cocina los spaghetti siguiendo las instrucciones del paquete en agua con sal. Escúrrelos y reserva un poco del agua de cocción.

Mientras tanto, corta la panceta en trozos pequeños y fríelos en una sartén grande hasta que estén dorados y crujientes. Retira el exceso de grasa si es necesario.

En un tazón aparte, bate los huevos, agrega el queso parmesano rallado y un poco de pimienta negra.

Agrega los spaghetti cocidos y escurridos a la sartén con la panceta. Mezcla bien.

Retira la sartén del fuego y agrega la mezcla de huevo y queso, revolviendo rápidamente para que los huevos se cocinen con el calor residual y creen una salsa cremosa. Si es necesario, agrega un poco de agua de cocción de los spaghetti para lograr la consistencia deseada.

Sirve inmediatamente con un poco más de queso parmesano rallado por encima.