"Este es un papel muy fuerte, fueron emociones encontradas como actriz"
Gabriela Spanic vuelve a la pantalla chica protagonizando una nueva temporada de la serie "Amores que engañan", donde interpreta a una mujer maltratada. Dice que lo que grabó ya lo había vivido "en carne propia".
Efe
La actriz venezolana Gabriela Spanic vuelve hoy a la pantalla chica en la segunda temporada de la serie "Amores que engañan", con la que busca darle voz a las mujeres que no han tenido justicia y que han sufrido maltrato de sus parejas.
"Siempre he hecho hincapié y he sido muy defensora de muchas mujeres que no han tenido justicia, que han sido perseguidas, de muchas mujeres en estado de cautiverio en su propia casa, durmiendo con el enemigo y este capítulo me llenó", dice la actriz a EFE.
"Amores que engañan" en cada episodio trata un tema diferente basado en situaciones reales.
Gaby será la protagonista del episodio "Talento robado", en donde interpreta a Elisa, una dueña de casa que ha dedicado gran parte de su vida a su familia y a su marido, interpretado por el actor Sergio Basañez.
Elisa siempre ha apoyado la carrera de escritor de su esposo, pero vive a la sombra de él y sufre maltratos tanto físicos como emocionales. Sin embargo, llega un momento en el que revela un gran secreto que la pareja ha escondido por varios años y que trastoca a la familia.
"Es un papel muy fuerte, no sabes cómo me metí en carne propia, fueron emociones encontradas a nivel de actriz, porque hubo escenas de violencia, escenas muy fuertes de llanto, de cachetadas, de confrontar esta situación que pasa también en la vida real", rememora.
Poder femenino
La serie, del canal Lifetime, replica el mensaje que acompaña cada episodio unitario del programa, que para esta segunda temporada vuelve a tocar temas relacionados con la violencia, salud mental, igualdad en el trabajo y el empoderamiento femenino.
Para Spanic, abordar estos temas fue una gran responsabilidad, pues considera que muchas veces los actores son "curanderos del alma", que ayudan a visibilizar estas problemáticas y a que la gente pueda darse cuenta si vive una situación como la que ven en pantalla.
"Ahora se habla mucho de la mujer empoderada, pero yo creo que es mucho más bonito una mujer que se ama a sí misma, que no permite que alguien le venga a levantar la voz, que le venga a decir que no puede lograr sus sueños. Entonces, cuando tienes el poder de amarte a ti, puedes lograr todo lo que tú pienses", afirma.
Por ello, para la artista fue muy importante interpretar este personaje, pues muestra cómo las mujeres de estas historias, tras vivir una gran desilusión, enfrentan con entereza la traición y el peligro, sin dejarse doblegar a pesar de su dolor. "Yo lo he vivido en carne propia, a veces permitimos esos maltratos o (tenemos) la ilusión de que esa persona va a cambiar", asevera. "No tenemos la capacidad de hacer cambiar a nadie (...) No (debemos) creer en pajaritos preñados (distraerse)", aconsejó.
Spanic, quien cumple 34 años de carrera, considera que pese a que a lo largo de estos años ha sufrido ataques, persecuciones y traiciones de los que le ha sido difícil levantarse, la pasión por la actuación y el cariño de sus fans le han ayudado a convertirse en un referente de la televisión en Latinoamérica. "Yo le agradezco a los enemigos porque gracias a ellos conocí mis fortalezas también, pero el público es maravilloso, el público es el que te pone, el que te quita", concluye.