Muestra de esculturas exhibida en Sala Viña registra bitácora de un simio
El artista local Said Rumie presenta hasta el 16 de junio, en el espacio ubicado en Arlegui 683 de la Ciudad Jardín, la exposición que cuenta con 18 piezas y que recorre su extensa trayectoria, donde la naturaleza alimenta su imaginario.
Marcelo Macellari - La Estrella de Valparaíso
Bitácora de un simio. Así se llama la muestra de esculturas que exhibe en la Sala Viña el artista local Said Rumie, quien explica así el curioso título: "Hace alusión al registro de viajes, entornos naturales y experiencias presentes, en un recorrido escultórico. Como tal bitácora donde los apuntes, letras se tornan dibujos y estos pasan al plano tridimensional como registro. Es una bitácora que consta de un recorrido de más de 15 años de travesía entre el ir y venir, entre mi imaginario y el entorno. En ella hago alusión al simio, no solo como primate, sino como base del proceso de la evolución, o como tal primate que es capaz de sorprenderse encontrando la diversidad de la simpleza".
El escultor viñamarino agrega que "la bitácora de un simio se presenta como título de una historia, como una retrospectiva constante, observando y atesorando siempre el camino recorrido. Sin encasillarme en un título de exposición basada en una forma, material o único concepto. Es una bitácora en constante fluidez de un simio que observa en suspenso el entorno y busca el medio de cómo representarlo".
La muestra considera un total de 18 piezas agrupadas por la materialidad en hitos o relatos: "Cordillera", "Ley del mono" y "Artilugios para arar". La selección de obras abarca distintas etapas, desde 2002 con la escultura "Eterna paciencia" , realizada por Rumie como estudiante de la Escuela de Bellas Artes de Valparaíso -donde actualmente es docente-, y diversos periodos hasta llegar a los actuales que se asociaron para esta bitácora.
El artista detalla los tres hitos que conforman el relato de esta muestra: "El deambular por un paisaje cordillerano, en donde la textura, contrastes rugosos y líneas puras , se entrelazan como cual ambiente propio de la naturaleza, incluyendo a las formas humanas; 'La Ley del mono', relacionada a la ley 20.898, la que permite regularizar una vivienda o ampliación, como tal idea que permitía en base a un dibujo o plano básico (un mono) a generar nuevas reestructuraciones de un constructo urbano. En este caso, tomo este concepto y libero el orden de estructura conocida (mi propia estructura), permitiendo deambular en variedad de materiales y en planos en sobre relieve o bidimensionales, relacionando la materialidad".
En tanto, explica que "Artilugios para parar", el tercer hito del relato, "corresponde a una serie de obras, instrumentos y conceptos generados a partir de los tiempos actuales políticos/nacionales, desde el estallido social a la nueva constitución, como instantes de cambios necesarios. Artilugios como instrumento, objetos que permitan preparar la tierra para nuevas y prosperas siembras (interpretación del concepto a modo simbólico), donde hago alusión al mito, al rito y al ser en cada obra escultórica, debido que están concebidas desde el entorno. Las formas proyectan en algunos casos seres replanteados en sus formas; el mito nace desde las historias contadas por quienes habitan los lugares, y el rito aparece como todo acto ceremonioso o proyección de altares en algunos casos".
Sobre el rol que juega la naturaleza en su obra, el escultor afirma que "es primordial, pues en ella no solo encuentro formas o ideas que alimentan mi imaginario, o líneas de croquis que complementen mi croquera. Al observar o encontrarme con la naturaleza, trae a mi memoria mi niñez, mi adolescencia, mi adultez. Suelo recorrer desde que tengo noción diversos parajes, lugares o entornos alejados de la urbe. Y hoy en día igualmente contemplo y me detengo en esos lapsus verdes entre tanto estado de gris cemento. En la naturaleza está el reencuentro íntimo entre el simio y mi persona".
Abstracto y orgánico
Said Rumie ha definido su propuesta escultórica como abstracta-orgánica, "por la relación que genera la forma abstracta construida por planos y cómo estos dialogan o componen la forma, con texturas representativas de un estado orgánico basado en lo que se encuentra en la naturaleza. De esta manera, se genera un quiebre o acento visual sin perder la composición de la obra".
Sobre la elección de los materiales, el artista asegura que "de una u otra forma todos tenemos un porcentaje de Diógenes. Recolecto y reciclo el material a medida que lo encuentro o me tropiezo con él, y a medida que el material me sugiere que lo adopte. Me agrada deambular entre la piedra, la madera, y el metal. Cada cual aporta con su carácter propio, cada cual al ser reciclado aporta con una carga incluso arqueológica con un pasado, un tiempo y una historia".
A la hora de definir la evolución de su trabajo, el escultor señala que es "como el paso de los años, con mayor reflexión y sin descuidar el oficio. Una evolución desde la mirada del paisaje, ya no natural, sino más bien del entorno".
La muestra "Bitácora de un simio" se exhibe hasta el viernes 16 de junio en la Sala Viña (Arlegui 683), en los siguientes horarios: lunes a viernes de 10.30 a 19.00 horas y sábado de 10.30 a 14.00 horas.