por Juan Guillermo Prado | ilustraciones de Néstor Flores Fica

Tempranamente en nuestra historia, navíos holandeses recorrieron nuestras costas. En 1599 la expedición holandesa de Baltazar de Cordes llegó a las costas de la isla de Chiloé y, al saber del levantamiento mapuche de 1598, que ya había destruido muchas ciudades españolas y mantenía bajo sitio otras, concertó una alianza con los huilliches. Gracias a esta alianza logró vencer a los españoles y conquistar la isla de Chiloé.

El 19 de abril de 1600 ocurriría la batalla de Castro, donde las fuerzas españolas venidas del continente reconquistaron Chiloé. Este acontecimiento significó la liberación de la ciudad de Castro, que por varias semanas estuvo ocupada por el corsario neerlandés.

El 12 de junio de 1615, una escuadra holandesa de seis veleros, al mando de Joris Spilbergen, llegó a Valparaíso e inmediatamente rompió fuego contra la población, reduciendo a escombros y cenizas las bodegas y las casas.

Desembarcaron 200 hombres y se trabaron en combate con los españoles en medio de una espesa niebla. Al llegar la noche, Spilbergen se retiró con sus tropas a los barcos. Recaló en Quintero, donde se aprovisionó de alimentos y agua, abandonando luego nuestras costas.

En 1643, una flota holandesa ocupó Valdivia. Esto fue parte de un proyecto fallido de los holandeses para establecer una colonia en Valdivia. La expedición fue dirigida por Hendrick Brouwer, quien murió durante la misión. Su sucesor Elías Herckmans llegó la ciudad el 24 de agosto. Vivía un escaso grupo de colonos. Los primeros acercamientos con los pobladores de Valdivia fueron todo un éxito; no obstante, la empresa fracasó cuando los vecinos comenzaron a desconfiar de los extranjeros.

Sin provisiones, en octubre de ese año los holandeses abandonaron la ciudad. Por esta excursión, desde el virreinato del Perú se ordenó la construcción de un sistema de fortificaciones marítimas para prevenir la ocurrencia de otros proyectos similares.

Tras la retirada de los holandeses, se refundó Valdivia y se fortificó el puerto. En 1645, fueron fundados los fuertes de Corral, Niebla y Mancera y en 1658 comenzó la construcción del fuerte de Amargos.

En Rapa Nui

Casi un siglo después, el explorador Jacobo Roggeveen, luego de recorrer por nuestras costas, emprendió rumbo hacia el oeste. El 5 de abril de 1722, fecha en que se celebraba Pascua de Resurrección, el corsario holandés, por azar, llegó a una isla en medio del océano, bautizándola como Isla de Pascua. Junto con ser el primer europeo que conoció los moais, informó que en la época vivían en la isla entre dos mil y tres mil habitantes.

PRESENCIA HOLANDESA

El pasado 27 de abril se celebró el "Día del Rey", fiesta nacional en el Reino de los Países Bajos, que recuerda el nacimiento del rey Guillermo Alejandro. Por este motivo entrevistamos al ingeniero comercial Ocker Gevaerts, de nacionalidad holandesa, quien se desempeña como cónsul honorario de los Países Bajos desde el año 2004. Llegó a Chile el año 1997 y, en el ámbito laboral, se ha desempeñado como ejecutivo en distintas empresas en la Región de Valparaíso.

-¿En qué año llegó el primer Cónsul holandés en Valparaíso?

-En 1827 fue nombrado en Chile el primer representante oficial de Holanda, el señor J.F. Dourster, cónsul en Valparaíso. La principal motivación fue para impulsar el comercio exterior de Holanda. Se fundó por iniciativa del rey Guillermo I la "Nederlandse Handels Maatschappij" (Compañía Comercial Holandesa). La intención del rey era utilizar el nuevo aparato diplomático para impulsar al máximo las relaciones comerciales, sin embargo, en lo que respecta a Chile y a la mayor parte de Sudamérica, fue solo un poco más de exploración.

-¿Con qué tipo de ciudad se encontraron?

-Dada la importancia de la ciudad de Valparaíso, se encontraba en una época de comercio emergente, con muchos inmigrantes extranjeros atraídos con posibilidades de crecer. En esa época la presencia de los extranjeros fue relevante ya que transformaron la sociedad de Valparaíso, otorgándole un carácter cosmopolita, que se manifestó también en su arquitectura y en el desarrollo urbano.

-¿Cuáles han sido los principales hitos de la gestión consular de su entidad en Valparaíso?

-La venta de fragatas holandesas a Chile demuestro la confianza y el magnífico vinculo que existe entre ambos países. Las relaciones bilaterales entre Chile y Holanda son óptimas. Holanda se transformó en unos de los principales mercados para las exportaciones chilenas. Los productos frutícolas y vitivinícolas son los más importantes de la Región de Valparaíso para llevar a Holanda. El puerto de Rotterdam tiene buenas y rápidas conexiones con toda Europa. A nivel mundial, cada vez es más importante contar con soluciones que permitan manejar el agua de manera adecuada y sustentable. Recientemente, se formó una alianza chileno-neerlandesa que ejecutará en el Aconcagua una iniciativa que abordará temas como la retención del agua, apoyo a gobernanzas, manejo de acuíferos y el tratamiento del agua residual.

-¿Cuántos holandeses y sus descendientes viven en el territorio nacional?

-Aproximadamente, entre 2.500 a 3.000 personas. No hay una cifra oficial disponible; antes los holandeses se inscribían en un registro, pero ya no por protección de datos de las personas.

La Inmigración Holandesa

-Tengo entendido que al sur del territorio nacional llegaron holandeses...

-Una docena de familias holandesas se establecieron en Chile entre 1895 y 1897, particularmente en Mechaico, Huillinco y Chacao. Egbert Hageman llegó a Chile con su familia, el 14 de abril de 1896, instalándose en Río Gato, cerca de Puerto Montt. La familia Wennekool inició la presencia neerlandesa en Villarrica. A principios del siglo XX, un gran grupo de neerlandeses llegó a Chile desde Sudáfrica. El 4 de mayo de 1903, un grupo de más de 200 neerlandeses zarpó en el vapor "Oropesa", desde La Rochelle en Francia. El 5 de junio llegaron en tren a la ciudad de Pitrufquén. Otro grupo de neerlandeses llegó poco después a Talcahuano, en el "Oravi" y el "Orissa". La colonia neerlandesa en Donguil fue bautizada como "Nueva Colonia Transvaal". Más de 500 familias neerlandesas se mudaron allí. El último grupo de boers llegó entre los años 1907 y 1909.

Actualmente, hay muchos descendientes de holandeses, como el actual canciller Alberto van Klaveren, nacido en Ámsterdam, cuya familia sobrevivió a la persecución nazi y llegó al país a los dos años; la exsenadora Jacqueline van Rysselberghe; la deportista Denisse van Lamoen y el triatleta Felipe van de Wyngard .