"Esto ayudará a sanar heridas aún abiertas en Chile"
Por Valentina Armijo Soto
El sanantonino Gonzalo Vega desea una instancia política que impacte positivamente en una Constitución actual, con sentido común y con conocimiento de los territorios, según manifiesta el candidato, para que nunca más las regiones queden fuera.
Su localidad y su visibilización es su objetivo, con experiencia como asesor legal, plantea defender su hogar.
¿Qué idea impulsa su candidatura actual?
Tengo la más íntima convicción de que nuestro país necesita urgentemente una constitución construida en democracia, mediante un proceso que al finalizar haya sido validado ampliamente por la ciudadanía y se ratifique por votación universal.
Creo que esto ayudará a sanar heridas aún abiertas en Chile por la Dictadura, tomando especialmente en consideración de que este año se cumplen 50 años desde el Golpe de Estado. Esto significa salir del paradigma de la Constitución del '80 y que somos capaces de dotarnos de una carta de navegación que le haga sentido a las mayorías, reconociendo también la importancia del respeto a las minorías.
¿Cómo incide su territorio y profesión actual en su candidatura?
Tiene mucho que ver. Durante los últimos años me he dedicado a las asesorías jurídicas, tanto en la diputación de Camila Rojas y con la delegación presidencial provincial de Caroline Sireau. Con ellas lo que más hice fue trabajar en el territorio y ver desde la calle las problemáticas reales de las personas. Quizá algunos puedan pensar que la constitución no debe representar a un territorio en particular, pero cuando encuentras problemas transversales en los territorios más alejados de los problemas de las grandes urbes, en este caso en nuestra misma región, puedes hacer un diagnóstico común de esas vivencias y transformarlo en norma jurídica constitucional.
¿Cree que la perspectiva de género debería ser una de las bases para la creación de una nueva Constitución?
Me parece fundamental incluir la perspectiva de género en la construcción del país que queremos, no solo para ahora, sino que también asegurando y mejorando los derechos políticos de las mujeres con una mirada de 20 o 30 años más. Es necesario que la presencia de las mujeres tome significancia en nuestras instituciones, y por tanto, la paridad es un principio que deberíamos asegurar a nivel transversal: en los directorios de las empresas públicas y semipúblicas, con una propuesta de, al menos, el 50% de presencia femenina en esos espacios. Además, algo que debemos promover y asegurar constitucionalmente es la eliminación de las distintas brechas de género que existen. La igualdad de género tiene que ser efectiva y ese es nuestro norte.
El Tribunal Constitucional es una de las instituciones que más críticas ha recibido en el último tiempo. ¿Debería seguir existiendo?
En la propuesta anterior se había planteado abolirlo y dar paso a la Corte Constitucional. Independiente del nombre que se le pueda dar, creo que debe mantenerse un órgano de estas características. Lo más importante es que en la práctica no se convierta en una verdadera "tercera cámara", pues altera los equilibrios democráticos del Congreso.