¿Qué mejor forma de crear un comedor acogedor, de diseño y con estilo que hacerlo mediante piezas de arte que le den un toque de personalidad y originalidad al espacio? Una apuesta segura y versátil con múltiples posibilidades en función de los muebles, la distribución y los gustos personales de cada uno.

Rústico, exótico, ecléctico, nórdico e incluso minimalista, sea cual sea tu estilo hay una pieza de arte que casa a la perfección con la decoración de tu comedor. Descubre a continuación diferentes ideas de cuadros para una estancia original llena de personalidad.

Siempre y cuando no estorbe al paso, apoyar un gran cuadro en el suelo es señal de personalidad, informalidad y originalidad. Sobre estas líneas, un proyecto de la interiorista Inés Benavides donde apuesta por un cuadro abstracto con cenefas de colores. Un claro ejemplo de que no hace falta colgar los cuadros centrados en la pared.

Los retratos en blanco y negro son una buena forma de decorar los comedores donde reina el estilo natural. Aportan personalidad y rompen con la monocromia del beige y la madera.

Si estás buscando un cuadro original para brindar sofisticación al comedor sin añadir demasiado color, una pieza de arte de grandes dimensiones que ocupe casi toda la pared con fondo blanco y formas negras siempre es una apuesta segura.

Colocar una fotografía de un espacio aporta profundidad al comedor, un recurso muy interesante en pisos pequeños. Además, como podemos observar en este proyecto de la interiorista Ana Escribano, se ha apostado por una obra de estilo clásico que contrasta con la modernidad y sofisticación del comedor.

Espacios eclécticos con sillones de formas singulares que contrastan con alfombras de colores complementarios y mesas redondas de madera, sin duda el mejor escenario para colocar un cuadro de arte abstracto.

En comedores con mucha decoración y con paredes de colores, es recomendable apostar por cuadros lisos o con pocos elementos. Por ejemplo, este comedor diseñado por Alicia Sánchez de Mill House, tiende a ser un espacio recargado y por eso se ha elegido el cuadro con ondas verdes.

Si estás buscando la forma de añadir color a un comedor sobrio, los cuadros serán tus mejores aliados. Escoge obras coloridas y conviértelas en las auténticas protagonistas.

¿Tienes una gran pared, y no sabes cómo llenarla? La opción más fácil es escoger una obra de arte de gran tamaño y colgarla (o, como vemos en este comedor diseñado por Cristina Ros, apoyarla en el suelo).

Para aquellas estancias llenas de personalidad con muebles originales y múltiples sillas todas diferentes y únicas, la mejor opción es apostar por un cuadro más bien minimalista con pocos dibujos y un único color para que la atención se centre en la singularidad del resto del comedor.

Un punto medio entre el encanto del estilo clásico y la actualidad. Una combinación segura si se hace en la justa medida: suelo de madera, paredes con molduras, mueble bar y lámpara clásica, mesa rústica y, de repente, una pieza de arte clásico que case a la perfección con ambos mundos.

FUENTE: www.interiores.es

Contraste de cenefas

Retrato étnico

Blanco y negro

Juegos visuales

Cuadros abstractos en el comedor

Efecto movimiento

Contraste minimalista

Cuadros XL

Estilo minimalista

Un punto clásico