Francisca Palma Schiller

Sorprendidos quedaron los porteños cuando una cantidad importante de escombros de material pesado en plena vía pública terminaron por cerrar parte del tránsito peatonal en Camino Cintura a causa de una casa que literalmente está "pendiendo de un hilo".

Según detallaron vecinos del cerro Mesilla, en Valparaíso, la situación se ha convertido en un peligro inminente, ya que el inmueble, que cuenta con una orden de demolición desde inicios del 2020 según los datos que ellos manejan, está colapsando por completo, por lo mismo, temen una tragedia similar a la ocurrida hace unos años en el centro de la ciudad Puerto, específicamente en la calle Huito. Las consecuencias en aquella oportunidad, fueron mortales.

Con el objetivo de que un desastre de esa magnitud no se vuelva a repetir en su querido cerro, es que la junta de vecinos del sector ha utilizado todas las herramientas disponibles para concretar su intervención lo antes posible, sin embargo, aún no tienen éxito. Hoy piden ayuda.

"En cualquier momento esta estructura, que se encuentra en malas condiciones, puede derrumbarse y provocar una tragedia que involucre lesiones graves a los peatones", señalaron los vecinos.

"Nosotros como junta de vecinos pedimos tiempo atrás la visita de una asistente social y obtuvimos respuesta, como también de parte de Obras del municipio. Nos informaron que esta casa tiene decreto de demolición desde el 30 de enero del 2020, por artículo 156. Esta casa se está inclinando, por lo que hemos hecho las gestiones con la municipalidad, solicitando su visita y a la fecha nos han ayudado de forma paliativa", explica Luis Rivera, presidente de la JJ.VV, quien asegura que al interior de aquel domicilio viviría una persona con discapacidad, pero que no sería el dueño de la casa y responsable de efectuar la demolición.

"La dueña desapareció del cerro hace años, como pasa mucho con las casas de Valparaíso, quizás hasta haya fallecido, pero desconocemos más detalles", agrega.

Camino cintura

Junto al riesgo evidente -donde las fotografías hablan por sí solas-, hoy se está sumando una segunda preocupación: la caída de material pesado al Camino Cintura, zona por la que transitan día a día incontables adultos mayores y niños, como también la locomoción colectiva.

"Hay escombros en el Camino Cintura, gracias a Dios hay unas barandas peatonales que logran sostener la caída de los escombros, pero eso no impide que pueda venirse, en el próximo temporal o terremoto, todo esto abajo. Es un lugar muy transitado, hay colegios cerca y por ahí sube toda la locomoción colectiva a Playa Ancha, frente a esa casa", precisa Rivera.

Envío de equipo

Ante esta denuncia, desde Operaciones de la Municipalidad de Valparaíso, se informó que "la Alcaldía Ciudadana ya está en conocimiento de la situación en el cerro Mesilla y hemos enviado al equipo técnico a cargo de las demoliciones para revisar en terreno este caso en particular".

"Tras concurrir al lugar, se deberá verificar si el inmueble cuenta con un decreto para ser demolido, en caso de contar con el documento respectivo, la vivienda será agregada a los terrenos que requerirán este tipo de operativos, una vez que se concrete la licitación de suministros para las demoliciones", añadieron a través de una declaración.

Por segunda vez y en menos de un mes, un local de pago de servicios y caja vecina ubicado en calle Batuco N°52, al costado del Mercado Municipal de Viña del Mar, sufrió daños y el robo de especies.

Su dueña, Romina Gómez, cuenta que está desde agosto del año pasado vendiendo y ofreciendo servicio de Servipag en este lugar y que no había terminado de recuperarse del primer robo que le significó un perjuicio económico de aproximadamente 300 mil pesosademás de aparatos electrónicos, cuando nuevamente fue víctima de la delincuencia.

Esta vez, señala, no pudieron robar dinero en efectivo porque tras la mala experiencia, tuvo la precuación de no dejar en el local ciertos implementos como las máquinas de pago y el dinero correspondiente a los pagos. Sin embargo, los ladrones se llevaron un aproximado de 3 millones y medio de pesos en productos, incluyendo mercadería de su otro negocio y ropa de su pyme.

"Es chocante enfrentarse a esto, ver que estás siendo vulnerado y no puedes hacer nada, una se siente sola", afirmó Romina Gómez.

Ambos robos fueron con la misma técnica, rompiendo los candados durante la madrugada e incluso pudieron pasar la rejilla de protección.

La afectada relató que llegó a las 8 de la mañana llegó a su local y se encontró con la mala noticia. Inmediatamente empezó a llamar al plan cuadrante sin tener respuesta por lo que resolvió acudir personalmente a la PDI para denunciar el robo .

En cuanto a la seguridad del sector, Romina Gómez manifestó: "Hace como una semana instalaron cámaras por fuera (...), pero estamos esperando a que venga un técnico, ver si podemos sacar una imagen que nos sirva de prueba. Además tengo una cámara justo afuera que es municipal, pero se hizo la denuncia a carabineros, al plan cuadrante, en la PDI, el tema pasó a fiscalía y aún no hay una orden para poder revisar las cámaras".

Además le robaron insumos de sus otros negocios, porque tenía la mercadería de su puesto en la playa y ropa de su pyme en el local. Por lo que tendrá que endeudarse o recurrir a ahorros para abastecer su negocio y poder seguir trabajando.