Gian Franco Giovines D. - La Estrella de Valparaíso

El inicio del año académico en las universidades de la región se acerca a pasos agigantados y, con ello, los estudiantes foráneos aprovechan los últimos días para lograr hacerse con el arriendo de una vivienda que les permita asentarse, ya sea para comenzar o continuar sus estudios.

La búsqueda, sin embargo, es compleja. En el año 2022, según el informe "Matrícula en Educación Superior en Chile", Valparaíso fue la segunda región con más estudiantes de pregrado matriculados, recibiendo al 11,3% de los universitarios a nivel nacional, solo por detrás de la Región Metropolitana (44,3%). Por ello, la demanda inmobiliaria es alta y las posibilidades, en cambio, son limitadas, lo que supone un escollo duro de sortear para los jóvenes que buscan arriendo en el Gran Valparaíso.

Antonia Toro Belmar (22) es estudiante 5° año de Obstetricia en la Universidad Andrés Bello, en Viña del Mar. Oriunda de La Serena, la joven decidió desde un principio irse a estudiar a la Ciudad Jardín.

"Quise estudiar acá porque no me gustaba la idea de estudiar en Santiago. Yo quería algo con costa, con playa, algo más similar a La Serena. Además me llamaba la atención Valparaíso, la bohemia", expresa la serenense.

Si bien Antonia asegura estar disfrutando su estancia en la región, cada verano ha tenido que lidiar con el mismo dolor de cabeza: buscar un lugar donde vivir de marzo a diciembre.

"Este año me costó mucho encontrar algo, pero tenía la experiencia de los años pasados, así que lo hice con anticipación y ya en diciembre tenía amarrado el departamento (...) Buscaba algo con 3 piezas y 2 baños, porque voy a compartir departamento con dos amigas", comenta Antonia, quien junto a sus 'roomies' deberán pagar $640 mil pesos mensuales.

Oferta es menor al 1%

Daniel Serey, gerente de estudios del portal inmobiliario TocToc, señala que el porcentaje de departamentos y viviendas disponibles para arrendar en el Gran Valparaíso alcanza apenas el 0,3%.

Además, agrega que "en términos del mercado de arriendo, nosotros consideramos que está muy dinámico y muy presionado. Por un lado, la necesidad de vivienda es muy alta, pero esto no se ha traducido en general a los precios, que se han mantenido estables. Creemos que esto se debe a que la situación económica no da para que los precios de arriendo sigan subiendo, a pesar de la poca oferta que hay".

Respecto al precio de las viviendas con foco universitario -es decir, de entre 1 y 2 dormitorios y hasta 2 baños-, desde TocToc indican que la comuna más barata para arrendar en el Gran Valparaíso es Villa Alemana, con un valor promedio de $350.000 pesos. En segundo y tercer lugar se ubican las comunas de Quilpué ($420.000) y Valparaíso ($430.000), mientras que los arriendos en Viña del Mar y Concón son los más caros, promediando el medio millón de pesos mensuales.

A fin de evitar la ocurrencia de carreras clandestinas en el sector Parque La Victoria y en la avenida Eastman (una de las principales vías de la comuna), el municipio de Limache presentó a la comunidad un proyecto que considera la instalación de dos pórticos lectores de placas patentes.

Estos dispositivos tecnológicos permitirán registrar las vehículos que participen en estas instancias ilegales y, a la vez, detectar las placas de automóviles que mantengan encargo vigente por robo o que hayan participado en la comisión de un hecho delictual. El trabajo se realiza en colaboración con la Delegación Presidencial Regional de Valparaíso, la Subdere y Carabineros.

El alcalde de Limache, Daniel Morales, indicó: "Lo vemos como algo bastante estratégico. Primero, por la distancia que tienen estos sectores rurales con el centro urbano. Segundo, por la interconexión que tenemos con el resto de las comunas, como Concón, Quillota y Olmué. Tercero, porque nos va a permitir desarrollar un trabajo preventivo, en control de velocidad, en detección de vehículos robados y evitando las carreras clandestinas, que en este sector se da bastante".

Estos lectores estarán coordinados con la labor que lleva a cabo el personal de la Central Municipal de Monitoreo y la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros.