Indignación en la previa de gala por tribunas sin acceso
Los fanáticos, algunos con varias horas de trayecto, fueron informados que no podían ingresar.
Mauricio Toledo - La Estrella de Valparaíso
Las pancartas, los saludos y los gritos de una fanaticada efusiva se extrañaron en la previa matutina de la Gala o "Noche Cero" del 62° Festival de Viña del Mar. Antes del mediodía decenas de personas llegaron a las cercanías de la plaza Colombia expectantes de ver famosos, pero de golpe se enteraron que las puertas de acceso al evento estaban cerradas.
En versiones anteriores, la Gala del Festival se enmarcaba como una gran fiesta popular, en donde el jet set criollo y la "plebe" interactuaba de forma armoniosa. Las graderías llenas, los manteles, huevos duros y el esperado momento de opinar en vivo los trajes y vestidos se esfumó.
Ema Céspedes, quien viajó con su familia desde Curicó para reservar un espacio, comentó sus apreciaciones. "Supongo que con las condiciones actuales del país hay otros intereses, los recursos no son los mismos, y en comparación con otros años, hay mucho menos contacto y visibilidad con los artistas. Antes la gente se ganaba un espacio y los niños jugaban en la plaza, pero ahora con todo cerrado nos sentimos lejos y sin interés de participar".
No sólo los visitantes se mostraron decepcionados, sino también los mismos viñamarinos que tildan a la fiesta como único identitario y propio de la ciudad y su gente. Ignacia Gallardo, oriunda de Forestal, se mostró molesta al respecto. "Hace cuatro años podías ver gente acampar días antes, arrendaban departamentos con balcones y llegaban súper temprano con ansias para ver a los famosos. Ahora recién nos estamos enterando que no se puede entrar, que es con una invitación anunciaron, y que ni siquiera podemos estar en la plaza. Fome, porque ese era el espíritu de la gala", declaró la viñamarina.
Ignacia, sumó a sus comentarios la falta de información y respeto que el público manifiesta tras invertir tiempo en viajes, esperas y especulaciones. "Los guardias están dando respuestas erróneas. Me dijeron que entre seis y siete el público podía entrar, y cuando di la vuelta dijeron que no, sin dar explicaciones.. Las autoridades esperan que los viñamarinos no hagan desastres, pero esto que han hecho lo es. Jugaron con nuestro tiempo, " concluyó.
180 asientos habían disponibles comunicó la producción de canal 13, los que acabaron por usarse con invitación.