Luego de dos años, peregrinos comienzan a llegar a Lo Vásquez
Eliminadas las restricciones sanitarias, este jueves se volverá a celebrar la festividad de la Virgen de la Inmaculada Concepción de manera masiva. Iglesia pide autocuidado.
Belén Velásquez - La Estrella de Valparaíso
A pie o en bicicleta, para pagar una manda o solo por fe, lo cierto es que luego de dos años el Santuario Lo Vásquez ya comenzó a recibir a los primeros peregrinos que pretenden visitar a la Virgen de la Inmaculada Concepción de cara a un nuevo 8 de diciembre.
Se trata de una de las festividades religiosas más importantes y concurridas del país que se retoma tras una serie de restricciones sanitarias que en 2020 y 2021 impidieron la celebración, al menos de forma masiva.
De esta manera, frente al templo ya es posible apreciar decenas de puestos de venta de artículos religiosos que comienzan a recibir a los primeros fieles, pues -tal como mandata la tradición- la festividad de la Virgen de Lo Vásquez se extiende por prácticamente una semana completa, reuniendo un sinfín de historias humanas, de amor o de dolor, que para los fieles se escriben al alero de la fe en Dios y la Virgen.
Óscar llegó al templo de Lo Vásquez a eso del mediodía de ayer luego de salir de Melipilla, Región Metropolitana, a las 7 de la tarde del lunes: "llegué apenas, me vine caminando y me costó... Gracias a Dios y a la Virgen había unos extranjeros y me trajeron en moto".
Mandas
"Fueron dos años sin venir y ahora vengo porque a un hijo mío le encontraron cáncer. Gracias a Dios se lo pillaron a tiempo y se lo sacaron así que vengo a pagar la manda", cuenta el melipillano.
Por otra parte está la historia de Jacqueline y Rodolfo, una pareja que hace 40 años se conoció en el Santuario y desde entonces, aseguran, nunca más se separaron.
Cuentan que decidieron concurrir antes al templo para evitar encontrarse con la muchedumbre y el abundante comercio -permitido o ilegal- que se instala en los alrededores del templo, pues nada se interpone en su fe.
"Cumplimos 40 años desde que nos conocimos acá mismo", cuenta Jacqueline, mientras Rodolfo agrega que "nos encontramos acá y este 8 de diciembre cumplimos 40 años juntos. Han sido muy buenos".
"Tenemos dos hijas y cuatro nietos", dice ella, "partimos dos y ahora somos 10" complementa su pareja.
"Todos los años venimos, siempre estamos pidiéndole cualquier cosa a la Virgen, ella es nuestra compañía así que siempre estamos acá. Nunca dejamos de venir. Si cuando no había actividad, igual pasábamos en auto y dejábamos algo", relata el matrimonio.
Ciclistas
Otros que nunca faltan en Lo Vásquez son los ciclistas, algunos aprovechan el corte de la ruta 68 (Ver nota de la página 3) para prácticas derechamente deportivas y otros simplemente usan el medio para poder llegar a Lo Vásquez de forma más rápida.
Es el caso de Héctor, quien junto a su grupo familiar se trasladaron en bicicleta desde Lampa, Región Metropolitana, desde donde salieron el domingo por la mañana.
"Venimos a pagar mandas a la Virgencita. Antes veníamos a pie, ahora que estamos más viejitos venimos en bicicleta. Somos siete y mi papá es el que lleva más años. También viene mi señora, mi hermano, mi hijo. Es bueno que se haya retomado esta actividad, es importante para la gente", cuenta el peregrino.
Llamado al cuidado
Desde el Santuario, el rector Andrés Valenzuela destacó que tras dos años "hay tanto que traer, tanto que pedir y agradecer a la Virgen", agregando que "la recomendación es lo que nuestro obispo tambión ha manifestado, poder cambiar las expresiones de dolor donde nos podemos hacer daño, entendiendo que Dios no quiere que lleguemos en ese estado acá".
"Vengo porque a un hijo le encontraron cáncer. Gracias a Dios se lo pillaron a tiempo así que vengo a pagar la manda".
Óscar, peregrino