Clásico Universitario queda en suspenso por petardos a Martín Parra en P. Ancha
El arquero de la U.de Chile tuvo que salir en ambulancia por el impacto de los fuegos de artificio en la revancha del duelo por Copa Chile disputado en Valparaíso. Desde la UC se negaron a dar el duelo por terminado; en la U exigen el triunfo.
Jorge Reyes Patuelli
Una bochornosa actuación por parte de la hinchada de Universidad Católica ocurrió ayer en el Clásico Universitario contra la Universidad de Chile. El duelo tuvo que ser suspendido, sin haber alcanzado los diez minutos de juego, luego que lanzaran bombas de ruido cerca del arquero azul Martín Parra, quien tuvo que salir en ambulancia. El portero fue llevado en un vehículo sanitario del Estadio Elías Figueroa de Valparaíso a una clínica en Santiago luego de que tres petardos le impactaran cerca en la revancha por el paso a semifinales de la Copa Chile.
El hecho ocurrió después de que Fernando Zampedri abriera el marcador desde los doce pasos luego de que el árbitro Felipe González cobrara penal tras mano de Felipe Seymour. El "Toro" transformó la falta por gol y, en medio de la celebración, parte de la barra de la Católica detrás del arco de Parra lanzó las bombas de ruido.
La lamentable situación se dio en un partido en que no iba a tener hinchas cruzados presentes, al ser castigados por el tribunal luego de los incidentes en la despedida de San Carlos de Apoquindo, pero una apelación de Cruzados permitió la asistencia de 7 mil hinchas como máximo. Ayer, Carabineros informó la detención de tres personas porque portaban fuegos artificiales en una mochila al ingresar al estadio.
El duelo iba 1-1 en el global, y hoy se convocó a una reunión urgente a las 13:00 horas para tomar una decisión sobre qué ocurrirá con el compromiso.
Trauma acústico
Con trauma acústico por el lado izquierdo y sin sus sentidos operativos quedó Parra, según el cuerpo médico de la U, quien fue inmediatamente trasladado a Santiago.
"El jugador en el suelo estaba muy confundido, no hablaba, a lo que me dijo el doctor que no estaba con sus sentidos operativos por la bengala, por lo que tomamos la decisión con los capitanes de suspender el partido porque no estaban dadas las garantías y cuidar la integridad física de los jugadores", dijo el árbitro Felipe González a TNT Sport.
En tanto, el presidente de Cruzados, Juan Tagle, dijo estar triste por lo ocurrido y anunció querellas contra los responsables. "Nosotros agotaremos los esfuerzos para identificar a la persona. Presentaremos querella criminal y perseguiremos hasta el final. Nosotros somos incapaces de abordar la seguridad de manera solitaria. Necesitamos a los carabineros de vuelta dentro de los estadios", aseguró.
Respecto a una posible decisión que le dé el triunfo a los azules, el técnico cruzado, Ariel Holan, dijo que "los partidos se ganan en la cancha, en el escritorio se decretan sanciones".
El presidente de Azul Azul, Michael Clark, dijo que "este partido se tiene que dar por terminado. Se debió haber jugado sin público. Actuaremos con todo el rigor de la ley". Además, el directivo agregó que "me imagino que el otro club quiera bajarle el perfil, pero esto no puede pasar".
La delegada presidencial regional Sofía González rechazó los incidentes y adelantó nuevas medidas de seguridad para próximos partidos similares.