Francisca Palma Schiller

Tal como el Transantiago, fue en febrero de este año que la Seremi de Transportes de aquella época informaba que producto de los lamentables episodios de violencia y para evitar la manipulación de dinero en efectivo, desde agosto de este año comenzaría a operar el pago electrónico al interior de los microbuses del Gran Valparaíso.

En la ocasión, las autoridades confirmaron reuniones con el gremio de choferes del transporte público para aumentar la seguridad a la hora de trabajar para así evitar que fueran víctimas de violentos hechos delictuales. La decisión fue tomada, en gran parte, debido a eso.

Hoy, a 3 meses de que se cumpla la fecha establecida, el nuevo subsecretario de Transportes, Cristóbal Pineda, confirmó la decisión y ratificó la iniciativa tras su visita a Valparaíso: la implementación del cobro digital comenzará a la brevedad y se ampliará a diversos recorridos.

Pero el nuevo visto bueno entregado por el subsecretario no ha estado exento de polémicas: mientras autoridades de la zona han valorado la noticia, la Federación de Conductores no está del todo conforme.

"La implementación de los cobradores automáticos es muy difícil que se lleve a cabo, ya que no están las condiciones para que empiece, no hay paraderos, se desconoce el formato de las tarjetas, no hay puntos de venta, no se ha definido si habrá una o varias tarifas", indicó Óscar Cantero, presidente de la Confederación Terrestre de la región.

Según palabras del representante, el gremio no se opone a la modernización y llegada de los validadores, todo lo contrario: aseguran que es una buena noticia que ayudará a sentirse más seguros a la hora de trabajar. Sin embargo, detalló que no han existido las conversaciones necesarias, ni tampoco capacitaciones.

"No estamos preparados; estamos a dos meses de su implementación y no hay conversaciones, ni capacitaciones. Aquí el problema es la fecha, porque por el momento, como están las condiciones hoy, este pago sería una aventura, un fracaso total", afirmó Cantero.

Falta de conductores y modernidad

Junto con esta incertidumbre, el presidente de la Confederación volvió a recalcar la falta de 4 mil conductores en la zona, falta que sin duda significará dificultades a la hora de poner en marcha el nuevo sistema.

"Algo que hemos estado pidiendo con las mesas de trabajo que tenemos en Santiago y acá, es hacerles entender a las autoridades que sin conductores, ningún sistema va a funcionar", precisó.

Además, otro análisis que manifestó el líder del gremio, son las condiciones complejas, atrasadas y poco modernas que mantienen los terminales de buses.

"Los terminales son verdaderos fundos rurales, para recibir esta tecnología, para poder recibir máquinas modernas, se deben hacer las cosas bien", comentó, acotando que más que el hecho de instalar el validador, deben existir modificaciones en el entorno de un microbús.

Punto de partida

Pero no todo fueron críticas. Para autoridades de la zona, tales como el senador de la región, Ricardo Lagos Weber, la noticia es positiva. "Éste debe ser el punto de partida y de no retorno para licitar definitivamente el transporte público en el Gran Valparaíso", recalcó.

Así, tras confirmar la medida, el parlamentario por la zona, indicó que, "se valora el esfuerzo desde el gobierno para darle curso, al cobro automático en las líneas de recorrido hacia Placilla; sin duda, un avance importante para nuestra región. Ojalá que esto sea el inicio de mejoras sustantivas en los servicios de transporte público en el Gran Valparaíso, extendiendo los cobros automáticos al resto de los recorridos y fomentando la electromovilidad a través de nuevos buses eléctricos".

A lo que agregó que se deberán poner los esfuerzos también en, "tener más regulación de los recorridos, y también con mejoras en los salarios y contratos de los conductores, lo que asegurará un trato más digno a los choferes y un mejor servicio para los pasajeros".