Un granito de arena para la tolerancia
De acuerdo con diversas investigaciones sobre el tema, viajar al extranjero a vivir una estancia de intercambio estudiantil durante la adolescencia genera mayor adaptabilidad a los cambios. Los estudios señalan que además estos periplos ayudan a abrir la mente respecto de otros puntos de vista o paradigmas culturales que se experimentan.
Milton Bennet, sociólogo estadounidense, propone que cuando un sujeto tiene la posibilidad de reconocer y discriminar diferencias culturales, logrará obtener un alto grado de sensibilidad intercultural, que le permitirá desenvolverse con otros con mayor soltura. Entrevistados que han participado de programas de intercambio han señalado que la experiencia no sólo les hizo madurar, sino que también aprender a ser más tolerantes y respetuosos con otros, y ganar seguridad y confianza.
Experiencias como estas son un grano de arena, pero que si se vuelven masivas o populares pueden ayudar a disminuir niveles de violencia que actualmente se están volviendo preocupantes, especialmente en escolares.
Así, conocer otras culturas y adquirir un nuevo idioma no solo es provechoso para obtener una herramienta más que ayudará en el futuro de un CV. Lo más importante es que fomenta a las personas a crecer con tolerancia, expandir los horizontes culturales y vivir en paz en comunidades.
Pablo Parera
EF Education First Chile