Conozca las razones del otoño adelantado de avenida 8 Norte
Geógrafo Luis Álvarez explica porqué en algunos puntos de Viña del Mar los árboles comenzaron a botar sus hojas en pleno verano. No es por falta de riego: la escasez de lluvia afectó los subsuelos que alimentan las raíces.
Belén Velásquez N. - La Estrella de Valparaíso
En grandes centros urbanos como el Gran Valparaíso es posible que la sequía no se sienta tan cercana, pues basta girar la llave de la cocina o del baño para ver salir agua sin ningún tipo de inconveniente. Sin embargo, el estrés hídrico se manifiesta de otra manera, pues inusualmente desde enero que en Viña del Mar se percibe una gran cantidad de hojas secas, tal como ocurre en otoño y si bien es una postal digna de fotografiar, está lejos de lo que se espera para un verano.
Y es que la escasez de agua avanza a pasos agigantados y ya golpea a las grandes urbes, situación que ha sido analizada por el geógrafo, magíster en urbanismo y docente de la Universidad Católica de Valparaíso, Luis Álvarez, quien ha estudiado el fenómeno advirtiendo que en la próxima primavera se podría presentar un importante incremento en casos de alergia.
El experto explica que la falta de precipitaciones ha hecho que disminuyan las aguas infiltradas que llegan a los subsuelos que abastecen a los sistemas verdes, como por ejemplo, la típica arboleda de 8 Norte o de avenida Libertad. "Los sistemas naturales viven de aguas precipitadas, no del riego y no deberíamos regar para no romper el equilibrio ecológico", dice Álvarez, quien ha estudiado los cauces del estero Marga Marga y de Sausalito.
Tranque sausalito
En ese sentido, la clásica avenida 8 Norte es una de las zonas que evidencia la sequía, pues se abastece del cauce del tranque Sausalito, "pero evitamos que el agua fluya, ha precipitado poco y no hay desbordes como para que el cauce humecte las raíces. Entonces, en 8 Norte llegó el otoño porque el sistema de subsuelo no tuvo la capacidad de mantener el verde y derechamente empezó el otoño", dijo Álvarez.
"Tenemos menos follaje cuando más lo necesitamos, en verano. A futuro no vamos a tener esa sombra si se mantienen las condiciones", advierte el geógrafo, quien sostiene que urge elaborar políticas públicas "como liberar las aguas de Sausalito para que se oxigene y tener la humedad del cauce que mantiene avenida 8 Norte".
El urbanista dice que parte de ese recurso "podría potabilizarse" para consumo humano en caso de emergencia, pero "las aguas tienen como destino original llegar al mar, aportar valores ambientales y formar parte del servicio ambiental en el plan. Gran parte de los nutrientes del mar son producto de los cauces y cuando represamos agua, represamos biodiversidad, sedimentos, las arenas que permiten que las playas se compongan. Alteramos varios aspectos al represar aguas, pero bien dosificada se puede liberar el cauce y mantener las áreas verdes", indica el entendido.
Plan de manejo
Aquello, advierte, porque "los árboles en una ciudad juegan muchos roles, como servicio ecosistémico, son sombra, mejoran el entorno. No impactan tanto como fuente de oxígeno porque para eso tenemos el mar como gran fuente".
Es en ese contexto que Álvarez indica que urge crear un plan de manejo para las arboledas. "Es cambiar especies o poner la misma pero más joven para que consuma menos agua. Grandes ciudades arboladas como Mendoza tienen planes de manejos severos, con una suerte de fichas clínicas de cada árbol. La poda y el riego son parte del manejo, pero naturalmente eso no se hace".
"El plan de manejo tiene que ver con los relevos de especies, tratamiento biológico, control fitosanitario, reconocer cuando hay enfermedades que erradicar para poder incorporar otras especies. Son muchas acciones para mantener una arboleda".
Supervivencia
En este escenario, el experto dice que es probable que empecemos a ver temporadas estivales más cortas desde el punto de vista "del verde", pues "las especies empiezan a despertar cuando los días se hacen más largos y como antes había agua infiltrada tienen la capacidad de reactivarse, eso es primavera. Pero si cada vez tenemos menos agua, ese despertar se va a demorar y agosto ya no será el mes de la brota. Podríamos tener primaveras y veranos más cortos del punto de vista del arbolado y un largo periodo de dormitanza en otoño e invierno esperando que cambien las condiciones de precipitaciones. El árbol es sensible a eso, si ve va a la Quinta Vergara, hay menos follaje porque hay especies condenadas a morirse por inanición".
Y es aquí donde entran las alergias, ya que "las especies sienten la amenaza y, por ende, la necesidad de reproducirse, por lo que generan más polen. Seguro que esta primavera vamos a tener muchos problemas con la alergia por el polen que van a generar especies como los plátanos orientales. Sentirán la amenaza y querrán reproducirse y su polinización es su sistema reproductivo".