En Valparaíso despiden a histórico político porteño Luis Guastavino
El exdiputado y exintendente, falleció en la casa de una de sus hijas en Santiago, un día antes de cumplir 90 años.
"Le gustaba la buena comida y en las giras por la región había que respetar el horario de almuerzo". Ese es uno de los recuerdos que el periodista porteño Gonzalo Gutiérrez, tiene de Luis Guastavino, quien falleció a las 5 de la madrugada de ayer, un día antes de cumplir los 90 años.
Gutiérrez trabajó junto a Guastavino cuando éste se desempeñó como intentendente de Valparaíso entre los años 2003 y 2006. "Era una persona culta, de trato académico y afectuoso con todos los funcionarios. Cuando salíamos a terreno recorriendo la región compartía los almuerzos con los conductores, todos integrados a la misma mesa. Impulsó el Centro de Estudios Regionales (CER) creó la Orquesta Filarmónica Juvenil y el programa que llamó Regipon Profunda visitando villorrios a los que nunca habían llegado autoridades regionales dando soluciones a demandas locales".
El Partido Socialista fue el encargado de dar a conocer la noticia a través de sus redes sociales. El exregidor de Valparaíso y también exdiputado, murió en la casa de una de sus hijas en Santiago y cerca del mediodía llegó hasta el edificio consistorial de la Municipalidad de Valparaíso donde ayer fue velado.
Orador con sentido del humor
Tamara Contreras fue su jefa de Gabinete cuando ejerció como intendente. Recuerda que fue "un político con gran capacidad de trabajo, un discurso inigualable. Persona con un gran sentido del humor, incansable, llegaba a las 8 de la mañana a trabajar y no paraba hasta la madrugada".
Muy recordados son sus primeros discursos, como cuando en referencia a a los políticos que proponían proyectos, pero no contretaban advirtió: "Hay que aterrizar los jumbos", frase por mucho tiempo recordada.
El consejero regional de la UDI, Manuel Millones, quien tuvo mediáticas peleas con Guastavino, comentó que "fue un buen intendente y en su gestión se profundizó el trabajo de descentralización, poniendo muchos énfasis en el futuro, colaborando con los avances en la denominada reconciliación política en la zona, y en ese aspecto destinó un buen tiempo de su vida, pero además tuvo una buena gestión de objetivos concretos para la región, siendo muy respetuoso con la oposición de ese entonces. Claramente hubo diferencias de opinión en los primeros años, fundamalmente por el caso de la implementación de los PGE, que a él le tocó enfrentar en su administración. Pero en la evaluación global, fue un muy buen intentente".
Millones manifestó además que "me tocó viajar con él al extranjero en el marco de las misiones internacionales, teniendo muy claras las propuestas de desarrollo para nuestra región y la necesidad de abrirse al mundo y recoger experiencias de otros países".
El socialista porteño, Abel Gallardo, relató que "me tocó trabajar con él en calidad de funcionario y de CORE. Lo recuerdo como un hombre con tanta experiencia de vida y cicatrices causadas por la política, que conocía tanto el mundo, pero que sin embargo y quizás por lo mismo, era capaz de mirar con detención los problemas más pequeños de la región y buscarles solución. Su sentido del humor era extraordinario. Aprendí de él que una salida humorística oportuna es el mejor antídoto para los momentos de tensión que siempre son inevitables.Tenía el don de la palabra pero con contenido, características que reunió con galanura".
El alcalde porteño Jorge Sharp, también tuvo palabras sobre Guastavino. "A nombre de la Municipalidad de Valparaíso queremos extender nuestro sentido pésame a la familia, amigos y cercanos a Luis Guastavino. Él dejó una huella en la política chilena, en la política de nuestra ciudad que muchas y muchos recuerdan. Hemos puestoa a disposición el Salón de Honor de la Municipalidad de Valparaíso para poder velar al exregidor Luis Guastavino, tal como lo hicimos con Sergio Vuskovic. Es una forma de reconocer el compromiso que tuvo Luis con la región durante tantos años".