Gran salto tecnológico en medicina reproductiva da el nuevo Hospital Fricke
Equipamiento de última generación permite que los exámenes y tratamientos se personalicen a cada pareja.
Según estudios de la Unidad de Medicina Reproductiva del hospital Dr. Gustavo Fricke de Viña del Mar, dos de cada diez parejas que buscan un embarazo, no logran su objetivo en un año. La frustración para muchas es enorme y ese estado anímico tampoco contribuye a conseguir el ansiado anhelo.
De ahí la trascendencia de que un hospital público permita a todas las parejas, sin importar su sistema de salud, poder acceder a tratamientos que los ayuden a cumplir su sueño de convertirse en padres .
El nuevo hospital público de Viña del Mar dio un salto tecnológico importante en cuanto a la adquisición de tecnología para exámenes y procedimientos de esta especialidad, lo que ha derivado en un mejor espacio para el personal pero también para las parejas que son atendidas en el recinto.
Así lo destacó el Dr. Óscar Espinoza, médico jefe de la Unidad de Medicina Reproductiva del Hospital Fricke, quien con más de veinte años en el recinto, ha sido testigo de la alegría de las parejas que logran embarazarse y también de la incorporación de nuevos profesionales y tecnologías en el centro asistencial.
"Desde el punto de vista de infraestructura, dimos un salto cualitativo importante en lo que a prestaciones a nuestras pacientes se refiere. Estos equipos son nuevos, tenemos la torre histeroscópica, que es una torre de última generación que permite hacer histeroscopias diagnósticas y, en la medida que vayamos ampliando el espectro de prestaciones, vamos a ir incorporando algunas nuevas y el ecógrafo nos permite hacer evaluación de reserva ovárica, hacer seguimientos foliculares y planificar las inseminaciones intrauterinas", detalló el especialista.
En el Hospital Gustavo Fricke se realiza una evaluación exhaustiva para decidir el tratamiento según las características de cada pareja, comenzando con el seguimiento médico, ecográfico y apoyo farmacológico para la hiperestimulación ovárica, relaciones sexuales dirigidas, según controles de seguimiento folicular o inseminación intrauterina.
Cuatro médicos especialistas, una matrona y un TENS acompañan todo el proceso, en el cual la paciencia y persistencia son clave. Los médicos son enfáticos en señalar que para hablar de un problema de fertilidad se debe evaluar a la pareja en conjunto y debe ser objeto de diversas evaluaciones para determinar el tratamiento a seguir.