Olmué ofrece atractivos criollos en este segundo 18 pandémico
Como suele ocurrir por estas fechas, los ojos se posicionan en el interior de la región. Ahí destaca Olmué, comuna que lucha por romper la estacionalidad y ofrecer turismo atractivo durante todo el año.
Empanadas, trompos, paseos en un camión por las calles y los pies de La Campana, cuecas, tonadas, juegos criollos y más cuecas, es lo que por estos días ofrece la comuna de Olmué. Empujado por una pujante Cámara de Turismo, la meta está más que clara: romper con la estacionalidad.
Luigina Pruzzo, presidenta de la citada agrupación, cuenta a La Estrella que con el teletrabajo la estacionalidad se ha roto. Hoy la tecnología avanza a pasos agigantados y, a diferencia de lo que ocurría hace 10 años, una familia se puede instalar en Olmué y tener acceso a internet de fibra óptica, trabajar, asistir a clases virtuales y, de esa forma, permanecer más tiempo en la ciudad que descansa a los pies del cerro La Campana.
Y es justamente ese cambio que permitió reimpulsar el generar en Olmué un turismo que vaya más allá del verano y las Fiestas Patrias. Una apuesta es concreta es "Pueblito Olmué", un espacio a metros de la plaza de la comuna y a tres cuadras de El Patagual, en donde se respira Chile.
Por solo mil pesos, entre jueves y domingo, se puede acceder, entre 11:00 y 21:00 horas, a una extensa cantidad de actividades que van desde los grupos folclóricos en vivo hasta viajes a bordo de un camión turístico que recorre por una hora las calles de Olmué, permitiendo observar lugares del valle y el cordón de cerros que conforman la Cordillera de la Costa.
Pero no solo eso, en el lugar hay cabalgatas al interior de una medialuna para grandes y niños, granja educativa y sustentable, también juegos criollos, exhibiciones huasas, y patio de comidas. Todo lo necesario para pasarlo bien.
La iniciativa, cuenta Pruzzo, funcionará por septiembre, pero la idea de la agrupación es que se extienda por todo el año. Acción concreta para romper con la estacionalidad liderada por Olmué Vive Turismo, explica.
Pero lo que se vive en el interior de este espacio -al que se puede acceder con pase de movilidad- es parte de un conjunto de actividades. En el aeródromo local, por ejemplo, hay un globo aerostático que le permite mirar el valle desde lo alto a una distancia del piso controlada.
A esto se suma el esfuerzo de empresarios hoteleros de la comuna, los que han implementado ofertas de trekking o canoppy, los que se pueden disfrutar durante todo el año. Además, espacios como Olmué Natura que todas las semanas tiene espectáculos musicales y de stand up en su oferta.
Pero hay acciones que ya operan desde hace varias semanas y que van en la misma línea. Una de ellas el museo al aire libre Olmué, espacio instalado en el Parque Pedro Aguirre Cerda y que permite -sin pago alguno- recorrer y conocer la historia de la Piedra del Brujo y conocer elementos que se usaban en el pasado en la zona.
Pruzzo acota que tanto las pinturas que hay en el lugar, como las carretas, juegos populares y tradicionales, así como los distintos espacios de las casas de campo que se recrean, han sido construidas con aportes de los propios vecinos.
El lugar, donde incluso se recrea una noria, también tiene una feria de emprendedoras del sector, los que -tal como en el Pueblito Olmué- son fundamentales para mantener este tipo de actividades vigentes, pues entregan una oferta extra para los turistas, los que pueden acceder a productos creados en la zona, muchos de ellos con sellos sustentables.
"Una familia se puede instalar en Olmué y tener acceso a internet de fibra óptica, trabajar, asistir a clases virtuales y permanecer más tiempo".
Luigina Pruzzo,
pdta. de la Cámara de Turismo