Trabajador del cementerio Santa Inés murió a 5 días de retomar sus labores
Isidro León se desempeñaba como jefe de patio y estaba tramitando su retiro. Se había reincorporado a sus actividades para compartir con sus colegas.
Hace más de 40 años que don Isidro León trabajaba en el Cementerio Santa Inés de Viña del Mar. Al igual que otros funcionarios que superaban los 65 años y que presentaban enfermedades de base, el miércoles recién pasado había retomado sus funciones tras más de 18 meses de permanecer en su domicilio debido a la pandemia.
Pese a que se le había planteado la posibilidad de no retornar si así lo estimaba, don Isidro manifestó su deseo de volver y estar nuevamente con sus colegas. Estaba cansado pero quería volver a estar con quienes había compartido tantas historias.
En eso estaba este lunes, en pleno horario de colación, cuando don Isidro comenzó a sentirse mal. Leandro Lazcano, uno sus compañeros, lo vio desvanecerse y pidió ayuda a sus colegas.
Llamaron de inmediato a la ambulancia y alertaron al administrador del camposanto.
"Cuando bajamos hacia donde estaba Isidro nos encontramos con Claudio Martínez haciéndole masaje cardiaco y David Ojeda dándole respiración boca a boca. Fue muy chocante. Nos percatamos que era algo grave", recordó con emoción Juan Carlos Herrera, presidente del Sindicato del Cementerio Santa Inés.
Todo fue rápido según recordó el dirigente. La descompensación de don Isidro se produjo aproximadamente a las 13.50 horas y a las 15.10 sus compañeros se informaron de su deceso.
"Estuvimos sus últimas horas con él. Entre los compañeros estuvimos turnándonos en la reanimación. La verdad es que siendo todos hombres y trabajando en el cementerio que es un espacio donde siempre hay mucha tristeza, fue muy duro ver partir a un compañero", admitió el trabajador.
Ante comentarios que el mismo dirigente catalogó como malintencionados, Herrera precisó que don Isidro, jefe de patio en el cementerio Santa Inés, nunca fue obligado a volver ni tampoco otro trabajador.
"No es efectivo que nos hayan obligado a volver, eso no es cierto, cumplimos todo un protocolo para un retorno seguro (...) Hemos tenido un trato excelente de la gente nueva que llegó, desde la alcaldesa para abajo, nos han brindado un trato extraordinario", aseveró Herrera.
Don Isidro León se desempeñó por más de dos décadas como jefe de patio, su labor consistía en coordinar las cuadrillas y en ese cargo lo sorprendió el año pasado la pandemia. Hace sólo unos meses se había contactado con el presidente del sindicato para solicitarle que tramitara su retiro. Quería trabajar hasta fin de año porque ya estaba cansado. Sin embargo, apenas se le planteó el retorno a partir del 1 de septiembre, pidió poder regresar para volver a estar con los suyos.
"Cuando le planteamos esto a nuestro gerente él me dijo de inmediato que sí, que Isidro se merecía eso y mucho más por el tiempo que llevaba", acotó el dirigente.
Corporación
Desde la gerencia de la Corporación de Viña del Mar, y a nombre de todo su equipo y de la alcaldesa Macarena Ripamonti, su gerente Jorge Cea, expresó la tristeza por el fallecimiento de Isidro León, quien se desempeñaba en el Cementerio Santa Inés, desde el año 1982.
"A requerimiento de nuestra alcaldesa, como gerencia hemos activado todos los protocolos necesarios y acompañado activamente, entregando contención y nuestros afectos a su familia y compañeros de trabajo, labor que hemos realizado coordinadamente con la administración y Sindicato de Trabajadores del cementerio. Tanto el día de hoy como mañana, acompañaremos a sus familiares, especialmente en su despedida, la que se desarrollará en el mismo cementerio de Santa Inés".
En relación con el retorno a las actividades presenciales en el mencionado cementerio, las que se han implementado desde el 1º de septiembre, se informó que éstas fueron programadas y acordadas en conjunto entre gerencia, administración y sindicato, cumpliendo todos los protocolos para un retorno seguro. El protocolo fue comunicado y difundido oportunamente a todos los funcionarios, brindando las facilidades para el trabajo remoto de las personas que tuvieron algún impedimento para retornar.