Plaza de juegos para niños está rodeada de cámaras de alcantarillado sin tapas
Hace 8 meses que los vecinos de Granadilla 4 en Miraflores Alto esperan para que Esval concluya los trabajos que inicio en enero.
Con una manguera de una lavadora en desuso Claudia Verdejo, presidenta del Comité de Vivienda Granadilla4 rescató hace sólo unos días a un perro que cayó al interior de una de las cámaras de aguas servidas que rodean la plaza de juegos para niños ubicada en la intersección de calle Mario Recordón con Pasaje Fresia.
Al recordarlo la dirigente se emociona porque piensa en qué habría pasado si hubiese sido uno de los tantos niños que a diario juegan en la plazoleta.
"Esa noche no pude dormir pensando en lo que podría haber pasado. Yo escuché al perrito y como pude lo saqué, lo lavamos, le hicimos un lavado intestinal, fue muy tremendo verlo flotando y cómo se hundía en la inmundicia", relata Claudia.
Desde enero pasado y debido a reiterados problemas de colapso de las cámaras de aguas servidas de la población, la empresa de obras sanitarias Esval decidió realizar una intervención mayor en el sector y así brindar a esta comunidad una mejor calidad de vida y evitar los continuos problemas. Sin embargo, la que sería por fin una solución definitiva, resultó en un trabajo que nunca concluyó y que hoy tiene a esta comunidad viñamarina viviendo entre tres cámaras de aguas servidas abiertas, continuas filtraciones y aposamientos de aguas servidas y un olor nauseabundo.
"Esto es un problema de años. Las cámaras se tapan porque ya no dan abasto. Ha aumentado mucho la población y las construcciones datan de mas de 60 años. Una de las contratistas de Esval vino a efectuar los trabajos y éstos no funcionaron. Abrieron, hicieron un socavón inmenso que dañó nuestra plaza, la sede del comité y arrasó con el mirador que teníamos", contó la dirigente.
Tras casi una decena de reclamos a la sanitaria y una presentación en abril ante la Superintendencia de Servicios Sanitarios, los vecinos decidieron, ante la nula respuesta de los estamentos, hacer pública esta situación que los tiene agobiados.
"Los trabajos los dejaron a medias y lo más grave es que dejaron las cámaras sin tapas y están llenas de fecas. El otro día se cayó un perrito y tuvimos que rescatarlo...no pudimos dejar de pensar en qué habría pasado si hubiese sido un niño porque los niños no han dejado de venir a la plaza", planteó Claudia Verdejo.
La presidenta del comité asegura que ni Esval ni la Superintendencia les han respondido a sus continuos reclamos.
Luis Ponce, vecino del Pasaje Fresia lleva un registro de los reclamos que han efectuado a la sanitaria y a la superintendencia y reitera que hasta ahora no hay solución.
"Esto lleva así desde el 16 de enero. Tengo más de una decena de números de reclamo. Incluso recurrí a la Superintendencia de Servicios Sanitarios - 24 de abril - y no pasó nada. Nos dijeron que Esval iba a solucionar el problema y hasta ahora seguimos como estamos", acotó.
A los peligros descritos por los vecinos se suma otro ambiental, dado que el continuo derrame de aguas servidas se mezclan con las aguas que provienen de vertientes y que van a dar a la laguna Sausalito.
Camión en panne
Alejandro Romero, subgerente zonal de Esval informó que "nuestras cuadrillas han atendido cada uno de los requerimientos de los vecinos del sector de Granadillas. En esta zona, nuestra red de alcantarillado se ha visto afectada por emplazamientos de viviendas ,entendemos de manera irregular, provocando incorporación de sedimentos y embanque por sobrecarga al intervenir los terrenos sobre el colector".
El ejecutivo agregó que "hemos implementado varias soluciones para corregir la situación, entre ellas la instalación de un nuevo tramo de colector de 20 metros y dos cámaras nuevas. Además, hemos ejecutado obras de relleno para evitar el desplazamiento de nuestras tuberías".
Romero añade que "el colector ha presentado en los últimos días un nuevo problema, esta vez bajo una casa que se ubica en un asentamiento irregular. Hemos solicitado a los vecinos su colaboración para que puedan retirar un camión en panne justo sobre una cámara de inspección para proceder a la desobstrucción, lo que no se ha concretado, pese a nuestra insistencia".
El subgerente zonal concluye y señala que "las labores de mantención se complejizan cuando hay tomas ilegales que interfieren con nuestras redes y no permiten que podamos abordarlas con oportunidad".