Tokio lució sus tradiciones y maravilló con detalles tecnológicos y de juegos
Inauguración sin espectadores destacó el mensaje de "juntos somos más fuertes" dado el actual contexto de la pandemia del coronavirus.
Nicolás Labra G.
La tenista Naomi Osaka fue la encargada de encender el pebetero olímpico en un silente Estadio Nacional sin espectadores, portando la llama en el último relevo frente a la espectacular estructura armada en el recinto. El gesto final de la dos de la WTA fue el cierre a una extensa pero sobria ceremonia en Tokio que destacó la cultura milenaria japonesa.
Los más fanáticos valoraron la música de diversos videojuegos que se orquestaron mientras se realizaba el desfile, otros se maravillaron con los casi dos mil drones que en el cielo sobre el estadio formaron los anillos olímpicos y después se movieron en una sincronía perfecta para ir representando el planeta en una secuencia que duró más de dos minutos, y que después siguió con una versión de Imagine de John Lennon armada a cuatro voces con diversos interpretes, entre ellos Alejandro Sanz.
Nueve fueron las piezas que tuvo la ceremonia y en una de las últimas se destacó el clásico teatro kabuki a cargo del actor Ebizo Ichikawa XI. Antes de eso se mostraron los cinco anillos tallados en madera gracias a los árboles que fueron plantados por los atletas que compitieron en 1964.
El mensaje, al final de la inauguración, fue "Juntos somos más fuertes", en alusión al contexto actual de la pandemia y que obligó a la suspensión de los Juegos en el 2020. "Hoy es un momento de esperanza. Sí, es muy diferente de lo que todos habíamos imaginado. Pero valoremos este momento porque por fin estamos todos juntos", dijo el presidente del COI Thomas Bach, previo a que el emperador Naruhito declarara inaugurados los Juegos Olímpicos que también tuvieron al presidente francés Emmanuel Macron, ya que la próxima cita será en París el 2024.
16 días brillará la llama olímpica, que se apagará el domingo 8 de agosto en Tokio.