Preocupante: se prevé un invierno más que seco
Déficit en la región llega al 64%, promedio "mejorado" por las inusuales lluvias de enero. El otoño que termina ha sido uno de los más deficitarios en términos de precipitaciones en los últimos 30 años.
Mirian Mondaca - La Estrella de Valparaíso
"Ya nada es como antes" es una frase que en más de alguna ocasión hemos escuchado de nuestros padres o abuelos y, si consideramos el seco otoño que hemos tenido en cuanto a las precipitaciones este año, no podría ser más cierta. Es que de aquellos meses de mayo de antaño, en los que las lluvias eran una compañía habitual en la zona central, pasamos a tener este 2021 uno de los más secos.
Estos antecedentes aparecen sobre la mesa cuando estamos iniciando junio, el mes en que comienza el invierno en el hemisferio sur y donde nos enfrentaremos al momento de la verdad. No obstante, las cifras que nos deja mayo no dan mucho espacio para ilusionarse: "El mes de mayo, la anomalía de precipitación (AP) de los últimos 30 años muestra que estamos con un 90% de déficit el mes de mayo que recién pasó", detalla Ana María Córdova, doctora en Ciencias mención Meteorología y docente de la Universidad de Valparaíso.
¡Gracias, enero!
Este 2021 sucedió algo inusual, y es que las sorpresivas precipitaciones que ocurrieron en la zona central entre el 28 y el 31 de enero, que en Valparaíso se concentraron alrededor del 30, dejan a aquel mes como el más lluvioso del año hasta el momento.
De forma paradójica, ese mes de verano generoso en lluvias coincide con uno de los mayos más secos desde que se tiene registro. "En Valparaíso, si vemos la estación de Rodelillo, por ejemplo, tenemos un 64% de déficit de precipitaciones hasta el 31 de mayo de 2021", dice Córdova.
"Con respecto al mes de enero, el episodio que vivimos el 30 de enero fue uno de los meses de enero más lluviosos de los últimos 71 años en la zona central", indica la experta.
Aquellas sorpresivas precipitaciones estuvieron asociadas a lo que conoce como un Río Atmosférico Zonal (ZAR, por su sigla en inglés), "donde hubo un transporte de vapor de agua, como una banda, en dirección oeste este, que interceptó la Cordillera de Los Andes en forma casi perpendicular. Estos ríos atmosféricos son poco frecuentes, incluso en invierno, pero esto fue lo que explicó el fenómeno de las altas precipitaciones que vivimos durante el mes de enero", añade Córdova.
Hasta el momento, aquel episodio de precipitaciones es el único que entrega un pequeño respiro este año ante la sequía que afecta a la zona.
Una pequeña muestra de aquello es posible notar si se compara la precipitación acumulada a esta misma fecha este 2021 con el 2020, por ejemplo, en la estación meteorológica Faro Punta Ángeles de Valparaíso.
En aquel punto de la zona costera, detalla Córdova, el acumulado el año pasado era de 19,2 milímetros. "En total normal a la fecha, deberíamos haber tenido una precipitación cercana a los 120 milímetros. Este año estamos mejor que el año pasado, porque llevamos acumulado 38,2 milímetros en esa estación, sin embargo, esto se debe principalmente a la precipitación del mes de enero", explica.
¿Cómo viene el invierno?
El fenómeno de La Niña (asociado a bajas precipitaciones) ya terminó, sin embargo, aún permanecen algunas condiciones frías en el Pacífico Ecuatorial, "pero ya estamos entrando a un año neutro", sostiene la experta.
Considerando lo anterior, el pronóstico estacional para junio, julio y agosto muestra que las condiciones secas pueden ser predominantes, con déficit de precipitaciones entre las regiones de Coquimbo y Biobío.