Masiva velatón afuera del H. Clínico en memoria de enfermeras fallecidas
Convocatoria reunió a más de una centena de personas, entre ellas la madre de Florencia Elgueta, quien murió en agosto de 2020.
Un doble propósito tuvo este miércoles la velatón que congregó a decenas de personas en las afueras del Hospital Clínico de Viña del Mar: recordar a las jóvenes enfermeras Vanessa Araya y Florencia Elgueta, fallecidas tras sufrir, según sus entornos más cercanos, constantes malos tratos y acoso laboral y reflexionar ante este tipo de hechos precisamente este 12 de mayo en que se celebró el día de la enfermería.
Pasadas las 18.30 horas comenzaron a llegar las primeras personas a esta convocatoria difundida por redes sociales.
La conmemoración estuvo marcada por las muertes de estas dos jóvenes profesionales que, coincidentemente, trabajaron en la misma unidad - la UCI COVID del recinto - y que terminaron sobrepasadas por el mal clima laboral según lo denunciado por sus cercanos.
Desde el recinto privado, reiteraron el dolor que ha provocado la pérdida de las profesionales e informaron que a fin de garantizar total objetividad y transparencia en el proceso de investigación, una fiscal externa está llevando a cabo el sumario iniciado tras conocerse del suicidio de Vanessa Araya.
La mayor parte de los asistentes concurrieron con carteles y globos blancos y azules, mientras otros encendieron velas para honrar la memoria de Vanessa y Florencia.
Entre los participantes, estuvo Claudia Escobar, madre de Florencia, enfermera de 23 años que también perdió la vida tras vivir supuestos episodios de acoso laboral en el recinto.
"Agradezco a toda la gente que ha venido porque yo siento que es desde el amor y también de la rabia (...) A mí me arrebataron lo más preciado, yo no temo a nada porque no tengo nada que perder, porque ya lo perdí. Lo más importante en mi vida era mi hija y yo la perdí en este lugar donde mi hija vino a desarrollarse como profesional a los 23 años, dejando su ciudad natal, Concepción", agregó.
La madre de Florencia aseguró que: "Todo lo que pasaba mi hija me lo contaba y hasta me lo grababa, para que yo viera la hostilidad entre las colegas".
"Florencia no se quitó la vida, yo responsabilizo al Hospital Clínico, ellos le quitaron la vida... Ella pidió ayuda, no se quedó callada", sostuvo.