"Bajé tanto de peso que si Everton necesita un lateral, me pueden llamar"
El campeón con la camiseta oro y cielo en 1976 ganó el partido más complicado de su vida tras estar 18 días hospitalizado tras contraer coronavirus. "Lo único que tengo claro es que me voy a morir enseñando a niños", reflexionó el exdefensor.
Nicolás Arancibia Bórquez
Erasmo Zúñiga ganó el partido más difícil de toda su vida. El campeón con la camiseta de Everton en 1976, estuvo 18 días hospitalizado en el Gustavo Fricke de Viña del Mar tras contagiarse de COVID-19, lo que hasta el día de hoy lo tiene con algunas secuelas que, según confiesa el propio "Monito", no son tan fuertes como para quitarle el sueño de algún día volver a hacerse cargo de sus escuelas de fútbol infantiles.
"Igual estoy preocupado, por momentos no me sale la voz y a veces voy caminando y como que me tumbo para un lado. Son solo esas cositas, pero en lo demás estoy muy bien", confirma el propio presidente de la Agrupación de ex Jugadores de Everton, quien desde principios de enero está de vuelta en su casa ubicada en El Belloto luchando para poder dejar en el pasado las secuelas que le dejó el coronavirus.
-¿Cómo ha vivido esos días en casa luego de haber estado más de dos semanas hospitalizado?
-La familia y los amigos han sido fundamentales en todo este proceso, ellos me han dado energía y fuerza para salir adelante. Yo creo que no la vuelvo a contar, de hecho quisiera agradecer a todos, a la gente del hospital que me atendió, que se portaron extraordinario; también a todos quienes me ayudaron espiritualmente y económicamente, agradecer también a mi agrupación, a Everton, y a todos quienes se preocuparon por mí, como fueron los casos especiales de Eric Godoy (futbolista de a Universidad de Concepción) y Pía Zamorano (reciente fichaje de Palestino).
-¿Ha tenido que realizar algún tipo de tratamiento o ejercicio para ir volviendo a la normalidad?
-Caminar, caminar mucho, ahora he estado viajando a Colliguay y he subido cerros, lo que me ayuda mucho. Aparte en la casa tengo esa maquinita donde hay que elevar una pelotita con la respiración. Todo lo estoy haciendo diariamente para volver si no al cien, al menos al 80 por ciento de mis capacidades y así retomar los trabajos con los niños, que es lo que a mí me da energía.
-Imagino que ha extrañado harto sus clases.
-Un montón, los papás me llaman y me preguntan que cuándo partimos con las clases, pero además de mi salud también está el problema del colegio. Los niños van a clases un día, después tienen que conectarse a un Zoom, hay horarios diferentes, pero apenas se pueda trataremos de hacer algo en nuestra canchita de Gómez Carreño viendo siempre qué es lo que pasa con Viña y la cuarentena. Lo único que tengo claro es que yo me voy a morir enseñando, por momentos creo que lo que yo enseño ya está obsoleto, porque en mi escuela no solo se habla de fútbol, sino también del respeto y los valores, pero las muestras de cariño que he recibido de tantos exalumnos y apoderados me volvieron a dar fuerzas.
-Entiendo que a raíz del COVID-19 también perdió varios kilos.
-Bajé como 14 kilos, la gente me pregunta que qué es lo que me pasó y yo les digo que me estoy preparando por si Everton necesita un refuerzo más. Bajé tanto que le dije a Gustavo Dalsasso que si necesitaba un lateral derecho, me pueden llamar. Hay que tomárselo con humor, en estos días me toca la segunda dosis de la vacuna, así que tengo que seguir cuidándome para seguir intentando entregar experiencia a los niños y niñas que estén interesados en aprender un poco de fútbol y de la vida en general.
-Hablando de refuerzos, ¿qué le parece el plantel que está armando Everton para la venidera temporada?
-El técnico habrá pedido a los jugadores que él quería, ahora, si tú ves, son varios los futbolistas que llegan picados. Tenemos a este arquero que ya estuvo acá antes pero que se lesionó y tiene que haber quedado con esa espinita clavada, lo de Barroso para qué lo vamos a explicar, yo creo que él va a tener su mejor año en el fútbol chileno y ojalá no se nos lesione, porque es un muy buen jugador, era el que sujetaba a Falcón en Colo Colo, porque este uruguayo será muy bueno pero un loco para jugar, y ahí Barroso cumplía con una labor fundamental.
-¿Da para ilusionarse con pelear algo más que el descenso como en las últimas temporadas?
-Sí, yo creo que Everton va a hacer un buen torneo, porque a lo mejor no tiene grandes figuras, pero sí tiene jugadores con mucha hambre, y eso creo yo que es lo que más se necesita en un jugador de fútbol. Ahora Everton además es una buena vitrina para irse a jugar afuera, tú haces una buena campaña y te vas directo a México, lo que también es un impulso, así que le deseo suerte al club, hoy hablo como hincha y siempre quiero que mi equipo esté metido arriba y nos de alegrías.
"Yo creo que Everton va a hacer un buen torneo, porque a lo mejor no tiene grandes figuras, pero sí tiene jugadores con mucha hambre".
nicolas.arancibia@estrellavalpo.cl