En los penales La Calera le dijo adiós a la Copa Sudamericana
Después de sobreponerse a un gol de entrada y dar vuelta el partido, perdieron 2 a 1 desde los 12 pasos.
Claudio Morales
El bailecito de los colombianos del Junior y los alocados festejos del delantero Miguel Borja, solo contribuyeron a que la bronca y la rabia fueran más grandes en los jugadores y en el cuerpo técnico caleranos. Después de un gran esfuerzo la clasificación a cuartos de final de Copa Sudamericana se había escapado de las manos en la definición a penales.
Unión La Calera fue capaz de remontar el resultado global de la llave ante el conjunto de Barranquilla, lo que se veía difícil de antemano tras la derrota en la ida. Una de las premisas de los jugadores dirigidos por el técnico Juan Pablo Vojvoda en la previa del duelo de revancha, era mantener el arco propio en cero, y desde ahí buscar la clasificación que se abrobachaba con un 1-0.
Pero todos los planes se fueron al tacho cuando aún no se cumplía el minuto de juego, y justamente Borja, el goleador de los tiburones, ensayó el primer y único remate al arco que pateó en los 90 minutos, y le clavó a pelota en el ángulo al meta Alexis Martín. Todo cuesta arriba.
El fútbol de toque y posesión de los rojos poco servía para adentrarse en territorio enemigo, ante un Junior que se agrupó en su campo, que cerró espacios y que practicó artimañas muy coperas para ganar tiempo e irritar a los caleranos: se tiraban al piso al mínimo roce y hacían tiempo sin pudor.
Dos goles en vano
Sobre el final del primer tiempo, Calera afinó un poco los circuitos, y un descuelgue de Wiemberg terminó con un centro que, mal despejado por los zagueros cafeteros, le cayó a Fernando Cordero que remató abajo y certero para emparejar las cifras y devolver un poco de esperanza.
Junior nunca apostó a jugar, solo a esperar que los locales se desgastaran en un dominio poco punzante.
Pero la insistencia calerana, aun con todos sus ripios, dio frutos en los 14 del complemento, cuando Cordero fue el que desbordó y centró tan preciso que el balón burló a los espigados centrales y cayó en la cabeza de Juan Leiva que decretó el gol de la ventaja.
Quedaban muchos minutos por delante para ir por la clasificación directa, pero el equipo de Vojvoda siguió nublado a la hora de buscar vulnerar la bien protegida defensa colombiana. Ni el cambio de Stefanelli por Castellani dio resultado, con la molestia del volante al ser reemplazado. Tampoco sirvió que Junior terminara sin piernas y con dos expulsados.
Los penales llegaron como una sentencia. Stefanelli y Andrés Vilches, se suponía las cartas más seguras para definir, fallaron. Y con eso ya no hubo vuelta. La Copa Sudamericana es parte del pasado para Unión La Calera.
1 minuto había pasado de partido cuando Junior anotó el primer gol y descolocó a los Rojos.
La Estrella de Valparaíso