"La obra tiene mucho que ver con lo que está pasando hoy"
Director y dramaturgo reestrena su gran éxito teatral "Neva" en formato radioteatro, que estará en cartelera hasta el 19 de diciembre por teatroamil.tv
Marcelo Macellari C. - La Estrella de Valparaíso
El dramaturgo y director Guillermo Calderón cuenta que en pleno estallido social mucha gente le hablaba de "Neva", su gran éxito teatral llevado por primera vez a escena en 2006. "Me decían que interesante sería ver la obra, porque el contexto es similar", recuerda Calderón, quien reestrenó la obra, pero en formato radioteatro y que estará en cartelera, en forma gratuita, hasta el 19 de diciembre a través de teatroamil.tv, como parte de "La Previa" de Santiago a Mil.
La historia de "Neva", considerado el primer clásico del teatro chileno del siglo XXI, está ambientada en San Petersburgo, durante el Domingo Sangriento de 1905 que inició la Revolución Rusa, cuando tres actores, incluida Olga Knipper, la viuda de Antón Chéjov, se reúnen en su sala de ensayo para preparar un montaje de "El jardín de los cerezos", pero el resto del elenco no llega porque, sospechan, se unió a la protesta contra el zar, cuyas tropas están ejerciendo una violenta represión. Entre esas cuatro paredes, los tres intérpretes se enfrascan en una discusión sobre el rol del arte y sus creadores en medio de una revolución que torcerá el futuro.
La versión radiofónica de "Neva" es interpretada por las actrices Trinidad González y Paula Zúñiga, ambas parte del elenco original, con la incorporación para esta versión del actor Nicolás Pavez. Los tres intérpretes estaban en su casa y desde allí, con sus propios teléfonos, grabaron sus voces, mientras que el compositor de la obra unió el material para armar el radioteatro.
Calderón explica que llevar su clásico de 2006 al radioteatro "fue una idea de Teatro a Mil, porque ellos están haciendo programación de pandemia y comisionando estos trabajos de radioteatro. Es muy interesante, porque no se trata de leer la obra y grabar. La obra es una puesta en escena que el elenco recuerda muy bien, así que quisimos llevar esa puesta en escena al formato del radioteatro. Fue difícil, porque nos encontrábamos con que en la obra hacíamos pausas, por ejemplo cuando una actriz se giraba, pero en la versión radiofónica eran silencios y no pasaba nada. Así que nos dimos cuenta que había que eliminar pausas y que cuando eran necesarias, debíamos incorporar gemidos, suspiros o una tos, para expresar que estaba ocurriendo algo más allá del texto".
-El radioteatro es un género casi perdido en Chile. ¿Tu interés es revivirlo?
-Sí, porque en países como Alemania e Inglaterra es importantísimo, muchos dramaturgos viven de eso y combinan la radio y el teatro. Es un súper género, la gente lo espera con ansiedad y ocupa un lugar en la cultura. Aquí en Chile se ha tratado de revivirlo, se han hecho proyectos, pero necesitamos una institución pública que esté comisionando regularmente la realización de radioteatros y que haya una promoción de largo plazo, para que el género, que tiene un glorioso pasado en nuestro país, quede y no sea un par de iniciativas aisladas. Necesitamos una radio pública que genere proyectos, porque el radioteatro, en plena época del podcast, perfectamente podría volver.
-¿Cómo se instala "Neva" en el Chile post estallido social?
-La obra tiene mucho que ver con lo que está pasando hoy y vuelve con una renovada actualidad, pues "Neva" plantea esta relación entre estar encerrado creando mientras afuera está ocurriendo una revolución y una matanza. Esa urgencia y contradicción sobre el rol del arte, quizás hace la obra más urgente hoy que cuando se creó en el año 2006. Al principio del estallido social se cierran los teatros y una actriz, María Paz Grandjean, recibe un balazo en la cara a la salida de una función de la obra "La pérgola de las flores", con lo emblemático que es eso. Y hoy, con la pandemia, se nos dice que la nuestra no es una actividad esencial, cuando el rol de la cultura es clave, porque ha sido un consuelo durante el encierro encontrarnos con las películas y los eventos culturales online. No estamos en los hospitales rescatando a la gente, pero estamos salvando el alma del país.
-Esta es la oportunidad también para que nuevas generaciones conozcan la obra.
-Sí, eso es muy importante. Además, a nosotros nos da muchas ganas de volver a hacerla y presentar un nuevo montaje.
-Se habla de "Neva" como el primer clásico del teatro chileno del siglo XXI. ¿Qué significó para tu carrera?
-Me encanta recibir esos halagos, en el sentido de que las carreras teatrales son tan frágiles y tan precarias. El éxito de "Neva" me ha abierto muchas puertas hasta ahora, no solo Chile, sino que internacionalmente. Es una obra que le tengo mucho cariño porque me permitió hacer algo muy bonito, con amigos además.
-Una de las puertas que te abrió la obra fue el cine, trabajando como guionista de los directores Pablo Larraín ("El club", "Neruda", "Ema") y Andrés Wood ("Violeta se fue a los cielos")
-Sí, a partir de mi trabajo teatral se acercaron directores como Pablo Larraín y Andrés Wood. Para mí fue muy interesante, no solo porque aprendí de ellos, sino que también logré partir de cero en una nueva profesión, lo cual ha sido muy fértil.
-¿Estás preparando actualmente otra obra?
-Sí, aunque al principio todo lo que ha pasado es un poco paralizante y primero viene la reflexión. Estoy preparando una segunda obra de "Mateluna", que continúa la historia de un preso injustamente acusado de un asalto a un banco que no cometió.