"Hoy la película, con todo lo que está pasando en Chile, agarra más fuerza"
Actor y guionista de teleseries debuta como director de cine con "Consuegros", adaptación de su exitosa obra de teatro, que tendrá preestreno digital el 28 de noviembre.
Marcelo Macellari C. - La Estrella de Valparaíso
Rodrigo Bastidas tiene una larga trayectoria como actor de teleseries ("Rosabella", "Machos") y exitosas incursiones como guionista de producciones dramáticas ("Pituca sin lucas", "100 días para enamorarse"), al tiempo que desde hace 35 años integra la compañía Teatro Aparte, una de las más longevas y taquilleras del país. Ahora, el actor y guionista da un paso más y debuta como director de cine con la película "Consuegros", que es precisamente la adaptación de una obra que estrenara con su compañía en 2014, la cual tendrá preestreno digital el 28 de noviembre (21 horas), a través de la plataforma streaming de Punto Ticket.
Sobre su debut como director de cine, Bastidas, quien en el 2008 protagonizó, produjo y escribió la cinta "Lokas" de Gonzalo Justiniano, comenta que "estoy muy orgulloso. Yo le tenía mucho respeto a esto de dirigir cine, pero la verdad es que de alguna forma uno al haber hecho teatro y haber participado en películas te da como un approach que hace que no sea ni tan complejo ni tan difícil. Además, siento que estoy aprendiendo y eso me motiva mucho".
La trama de "Consuegros" arranca cuando la pareja de novios, interpretados por Milena Bastidas y Sebastián Badilla, desde Barcelona les encargan la organización de su matrimonio a sus padres, quienes se reúnen por primera vez en un hilarante almuerzo donde todo puede suceder. Elena Muñoz encarna a una sicóloga neurótica, densa y muy descalificadora con su marido, Gabriel Prieto, un apocado y aburrido contador judío. Magdalena Max-Neef y Rodrigo Bastidas, por su parte, son un matrimonio divorciado; ella una mujer conservadora, frívola y desatinada que aún espera recuperar a su marido, y él un mujeriego y gozador de derecha.
Chile dividido
El encuentro dará pie a una pelea a muerte por defender sus exagerados principios y ser quienes se salen con la suya en la organización de esta boda. "El guion tiene mucho humor negro y desparpajo, y es curioso, porque la película hoy está más vigente que la obra de teatro cuando la hicimos. En ese momento, 2014, había efectivamente divisiones entre la izquierda y la derecha, entre los católicos y judíos, pero hoy en día la brecha es gigantesca, algo que se agudizó con el apruebo y el rechazo del plebiscito. Hoy la película, con todo lo que está pasando en Chile, agarra más fuerza. Son dos matrimonios, que no se conocen, piensan distinto, tienen distintas maneras de mirar el mundo y no son capaces de ponerse de acuerdo en nada. Si eso lo llevamos al acontecer nacional, es justo lo que está pasando. La lógica sería aprender de esto, porque uno de las comedias aprende mucho".
-¿Cómo te preparaste para dirigir?
-Tomé un master de guion en Barcelona y luego lentamente siento que fui adquiriendo una experiencia. También me di cuenta que te vas apoyando mucho en el equipo y como yo estoy acostumbrado a trabajar en equipo por la creación colectiva, no me resultó tan difícil. Además, el elenco protagónico son mis compañeros de Teatro Aparte. Somos amigos y sabíamos cómo eran los personajes, porque los interpretamos en la obra, así que lo único que hicimos fue bajar el tono y la gesticulación teatral, transformándolo en un tono y estilo cinematográfico, donde todo es más sutil y más detalle.
-¿En qué se diferencia la película de la obra de teatro?
-Creo que armamos un guion muy distinto a la obra y eso se nota. La gente que vio la obra y ahora la película dicen que resolvimos muy bien el uso de locaciones, para diferenciarla del teatro. Pasamos del comedor, a la piscina, al baño. Hicimos muchas escenas en Barcelona, que quedaron muy bonitas y le dieron mucho aire a la película e incorporan a los personajes jóvenes, que en la obra de teatro no estaban. Aquí le hicimos una historia muy bonita y muy romántica, donde pasan por todo un arco dramático.
-¿Por qué decidiste preestrenar la película en formato digital y no esperar una futura apertura de los cines?
-Siento que hoy día uno tiene que adecuarse y si te tiran a una piscina, hay que ponerse a nadar. Teníamos todo listo, pero no dijeron tómense una micro y váyanse a otra piscina. Decidimos sacar esta guagua con fórceps y el hospital sin luz, porque tiene que nacer igual. Yo creo que esta guagua va a nacer bien y estoy seguro que la película a la gente le va a encantar, se va entretener y va a correr la bola. Nosotros estamos súper contentos con el resultado, nos gusta mucho la película y estamos orgullosos como grupo que lleva casi 35 años trabajando.
-Luego de "Consuegros", rodaste otra película en plena pandemia y también preparas la versión cinematográfica de "Viejos de mierda".
-Simplemente dije hay que aprovechar la situación y a través de una invitación que me hizo el productor Patricio López, escribí y dirigí una comedia sobre una boda en pandemia. Estoy muy contento de haber logrado hacer algo que parecía imposible, tomando todas las providencias del caso, con PCR, buzos y mascarillas. Y no se enfermó nadie. Fuimos capaces de dar trabajo a actores y técnicos que en ese momento no estaban en nada. En el caso de "Viejos de mierda", el guion está listo, pero como tiene muchas locaciones, es compleja de rodar en este momento. También tenemos proyectado hacer "Viejas de mierda", pero vamos a paso a paso.