Cierre de cementerios golpea a los vendedores de flores
Con la medida decretada por el Minsal, perdieron las ventas de la mejor fecha del año para su rubro. La disminución de las visitas a los camposantos les ha afectado en los últimos meses
Francisca Palma Schiller - La Estrella de Valparaíso
Durante los primeros días de la semana pasada, desde el Gobierno anunciaban una nueva medida para combatir el contagio por coronavirus en nuestro país y evitar aglomeraciones: los cementerios debían permanecer cerrados los días sábado 31 de octubre y domingo 1 de noviembre, fecha conocida como el "Día de Todos los Santos".
Y así fue. Con una postal completamente distinta a años anteriores, los camposantos no recibieron ningún tipo de visita durante este fin de semana. La población cumplió con la medida y adelantaron las visitas a sus difuntos en aquellos cementerios que permanecen abiertos, pues otros, como Playa Ancha, 1 y 2 de Valparaíso, y Santa Inés, solo están abiertos para funerales.
Rejas completamente cerradas, algunas flores ya marchitas y cero aglomeraciones fue parte de lo que se pudo ver durante este domingo en la región.
Pero pese a que muchos acataron la medida del ministerio de Salud, quienes se vieron realmente afectados en términos económicos fueron los vendedores de flores, ya que para los floristas este fin de semana, que podría haber sido clave, no fue para nada alentador.
Escasos puestos abiertos, pocos arreglos armados y poco ánimo es lo que se podía sentir a las afueras del Parque del Mar en Concón.
"Fueron días pésimos, este año fue pésimo, muy malo a comparación del año pasado. Bajas las ventas, muy caras las flores también para nosotros y anda muy poca gente. Este fin de semana está cerrado el cementerio y abre ya en la semana, vamos esperar qué va a pasar, pero la semana pasada fue mala", nos cuenta Juana Pérez, una de las vendedoras de la pérgola de flores que está ubicada en el sector.
Unos puestos más allá, se encontraba Marisol Jil junto a su marido arreglando su puesto. Al igual que Juana, para ella también han sido meses difíciles y un fin de semana de bajas ventas, pero agradece la organización y las medidas sanitarias por parte de las autoridades.
"Las medidas han sido oportunas y necesarias, nos afecta bastante eso sí, hemos estado parados cinco meses y se ha visto bastante en desmedro el asunto de las ventas, en la parte comercial nos hemos sentido tocados. Pero creo que cuando hay un orden y un horario, hay un trabajo mejor organizado para el parque y para la pérgola. Sabemos que son medidas necesarias, porque así se cuida la ciudadanía en general y nosotros", reflexiona Marisol.
Pedir hora
Con el objetivo de organizar las visitas, el Parque del Mar está agendando horas a través de su sitio web, para que de esta manera no se generen aglomeraciones y se respete el aforo permitido.
Si bien esto no ha ayudado a las ventas de la Pérgola, vendedoras como Juana han logrado reinventarse en medio de esta crisis. "Yo tengo unas clientas que no vienen por temor al COVID y yo les voy a dejar los arreglos florales adentro a sus difuntos para que no se arriesguen. Sabemos que ahora hay que pedir hora para entrar, entonces se ha vuelto complicado para todos, además son horarios restringidos y poquitos", nos revela Juana Pérez.
Así mismo, antes de la celebración del día de ayer, muchos visitantes intentaron ingresar al cementerio, donde se enteraron que el ingreso solo es permitido para quienes pidieron una hora con anticipación vía online.
"Quería visitar a mis papás antes del domingo, pero llego aquí y me entero que hay que agendar. Me metí también al sitio web y ya no hay fechas disponibles hasta la otra semana. Solo queda esperar y estar atenta a los horarios que se señalan en la página", nos expresó Claudia Muñoz durante el fin de semana.
1 de noviembre se celebra el Día de Todos los Santos y muchos deudos van a cementerios.