Captura de prófugo del caso Lara trae consuelo y tranquilidad a la familia
Felipe Ríos entró a la cárcel El Manzano de Concepción a cumplir los 12 años de presidio que le dieron en 2018.
Belén Velásquez Neracher - La Estrella de Valparaíso
Esperanza y algo de consuelo trajo para la familia Lara la detención de Felipe Eduardo Ríos Henríquez, uno de los seis condenados por el incendio en el que murió el guardia municipal Eduardo Lara (70), el pasado 21 de mayo de 2016, cuando un grupo de jóvenes descerrajó la cortina metálica de la farmacia Ahumada de avenida Pedro Montt con Las Heras, en Valparaíso, para arrojar una bomba incendiaria y luego acelerante. En paralelo se desarrollaba la cuenta pública presidencial.
La tragedia
En cosa de minutos la acción vandálica desató una tragedia. Un incendio consumió el edificio que albergaba en sus altos a las oficinas del Concejo Municipal, resguardadas por Lara. El efecto de las llamas y el humo hicieron que el funcionario muriera por inhalación de monóxido de carbono pese a que durante unos 40 minutos, los equipos de emergencia intentaron reanimarlo.
Tras intensos peritajes, el OS-9 de Valparaíso identificó y detuvo a seis implicados, pero tras la formalización quedaron libres y nunca estuvieron en prisión preventiva. Sin embargo, tras un largo proceso judicial, en julio del 2018 fueron sentenciados a penas de cárcel: 12 años para Ríos y Miguel Ángel Varela y 10 años y un día para Hugo Barraza, Nicolás Bayer, Rodrigo Araya y Constanza Gutiérrez. Todos condenados por incendio con resultado de muerte. A Varela, además, se le dieron 3 años y un día por porte de bomba incendiaria.
En diciembre de 2018, la Corte Suprema confirmó la sentencia y el 26 de ese mes, se despachó una orden de detención en contra de los condenados.
Quiso escapar
Pero no fue hasta este sábado, un año y medio después, que una pareja de carabineros motorizados de la Sección de Intervención Policial de la Prefectura de Concepción, región del Biobío, dio el golpe y detuvo a Ríos: quiso huir, corrió, pero la astucia de los uniformados lo impidió.
"¿Felicidad? No me puedo sentir feliz", dice el hijo de la víctima, Luis, pero "se siente algo de tranquilidad y consuelo al ver que empiezan a caer. Espero que no sea el único".
Pese a que se podría asumir que Ríos, quien arrojó el acelerante al fuego según estableció el Tribunal Oral de Valparaíso, andaba oculto, desde Concepción el teniente Felipe Gutiérrez contó que la detención se concretó en el skatepark del Parque Ecuador, un lugar público y concurrido de la ciudad.
"Se le hizo un control preventivo y cuando los funcionarios se percatan de la orden de detención por incendio, se le consultó y él mismo contó que se trataba del siniestro ocurrido en Valparaíso el 21 de mayo y que producto de aquello ya no se realizaba la Cuenta Pública Presidencial en esa fecha".
La experiencia policial hace pensar al oficial que durante este tiempo, Ríos debe "haber pasado por distintas regiones mientras se encontraba prófugo. Es algo recurrente en quienes se ocultan para evadir su detención".
Otra apariencia
Asimismo, Gutiérrez señaló que "se notaba reacio a la policía y en apariencia estaba cambiado en comparación a la foto de carnet. En la foto se mostraba con un mohicano y varios aros, ahora presenta el pelo más largo y usa jockey. Ha cambiado su atuendo y probablemente por eso pasaba más desapercibido .
Por este hecho, la Municipalidad de Valparaíso se querelló, aunque después la actual administración abandonó la acción judicial. Jeanette Bruna, exjefa jurídica municipal calificó la detención de Ríos como "un hito dentro del proceso".
"Si están prófugos es porque nunca se decretó la prisión preventiva y la Fiscalía no apeló junto con nosotros ante la Corte. Cuando salió la condena, ellos llevaban tiempo sin firmar y se demostró una falencia no menor en el sistema. Esto, sumado a políticas públicas de autoridades comunales que aplican mano blanda al momento de condenar la destrucción, nos lleva a vivir en un permanente peligro. Exigimos a Fiscalía, Poder Judicial saber cuáles son las medidas reales que se van a tomar para que los otros cinco condenados por el asesinato de Eduardo Lara sean encontrados".
Parte querellante en la causa también lo fue la Intendencia Regional, por lo que el intendente Jorge Martínez dijo que se trata "de una excelente noticia para quienes conocimos y quisimos a don Eduardo. No queremos criminales en las calles, nos alegramos de que se haga justicia".
Desde el Ministerio Público, el fiscal Cristian Andrade se refirió a la detención, pero no a nuevas diligencias en el caso, mientras que desde el Poder Judicial, informaron que se ordenó a Carabineros la entrega de Ríos "a funcionarios de Gendarmería para que sea ingresado en calidad de rematado al Centro de Cumplimiento Penitenciario Biobío".
Para Luis Lara, "esto sin duda va a activar el caso, renueva la esperanza de que esas personas caigan, que caigan todos los que tienen que caer".