La Corporación Everton quiere renacer de sus propias cenizas
Directorio transitorio de la entidad busca la unión de todos los estamentos oro y cielo por medio de un camino de paz.
Nicolás Arancibia Bórquez
La Corporación Everton quiere renacer como el ave fénix. Tras el fallecimiento de Carlos Salazar; Wilson González, vicepresidente de la entidad, quedó al mando de los designios de la corporación, tomando las riendas de un trabajo que comenzó meses antes, el cual busca unir a los evertonianos en pos de crear una agrupación sólida, unida y que agrupe cada vez más ramas.
"Nosotros queremos reencantar al pueblo evertoniano. Una vez que asumimos la presidencia transitoria, porque así lo establecen los estatutos, abrimos el libro de socios para que todos aquellos que quieran ser parte de esta agrupación, puedan hacerlo. La idea es construir juntos un futuro mejor, eso era lo que más pedían los evertonianos", sostuvo el propio González, quien también es presidente del PPD en Viña del Mar.
La idea del nuevo directorio es llamar pronto a elecciones para que sean los mismos socios quienes elijan a sus representantes. No obstante aquello, el brote de COVID-19 ha dilatado este proceso, aunque según recalca el dirigente viñamarino, "ya estamos confeccionando una ficha de ingreso a la corporación, la cual pronto será dada a conocer a la comunidad, con el fin de que la gente sea parte de este sueño. Todo lo pasado quedó allí, en el pasado, veremos cómo restablecemos el ánimo y la confianza, pero hoy solo queremos construir, esa es la idea nuestra".
Al ser consultado sobre si ha tenido algún tipo de reunión con los dirigentes de Everton, González aseguró que "hemos tenido algunas conversaciones que no han sido muy gratas, porque la sociedad anónima es eso, una sociedad anónima, nosotros somos la parte viva, la parte modular de Everton. Pero hoy nosotros no queremos pelearnos con ellos, solo establecemos nuestras pautas de trabajo, les dijimos que la corporación era independiente de la sociedad anónima, que se rige por estatutos independientes. Nosotros vamos a a seguir apoyando al equipo de fútbol, pero además de eso, tenemos más logros de nuestras diferentes disciplinas. Al final, el que no quiera apoyar y no quiera construir, aquí no es bienvenido".
Gustavo Arias, actual director deportivo administrativo de la corporación, ha sido quien ha llevado adelante las reuniones con la sociedad anónima oro y cielo, asegurando que llevar a cabo el proyecto del nuevo directorio "nos ha costado lágrimas de sangre, tuvimos una conversación con la sociedad anónima y nos dijeron que si un representante de ellos no quedaba como presidente, ellos no tenían nada que ofrecernos y perderíamos todo lo que nos daban. Nosotros queremos olvidar todo, simplemente buscamos la unión, se han reunido con nosotros diferentes agrupaciones de hinchas y a todos les hemos dicho que por favor se olviden de todas las broncas, de las guerras, de destruir cosas, de demostrar con violencia algún punto, porque tenemos gente bastante capacitada, hay que levantar la corporación, canalizar lo que sabemos con actividades propias".
El sueño del gimnasio
En el paradero 10 de Achupallas se encuentra un terreno cedido en comodato a la Corporación Everton, préstamo que vence en septiembre de este año y que los directivos ya están trabajando para renovar. Según confiesa el propio González, la idea es levantar en esos terrenos un gimnasio para albergar a las 12 disciplinas con las que hoy cuenta la corporación.
"El sueño de los evertonianos es volver a tener un gimnasio, en calle Viana tuvimos uno por muchos años. La idea es que todas las disciplinas deportivas lo disfruten, porque la Corporación Everton no solo es fútbol, hay diversas ramas, 12 en total, y queremos que haya un lugar donde se pueda hacer deporte, donde los viñamarinos y los evertonianos puedan juntarse, que lo podamos cuidar y embellecer, de tal forma que todos se sientan orgullosos al verlo", cerró el dirigente.
"Todo lo pasado quedó allí, en el pasado, hay que restablecer la confianza, hoy solo queremos construir".
Wilson González
"En la S. A. nos dijeron que si un representante de ellos no quedaba como presidente, no tenían nada para ofrecernos".
Gustavo Arias
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