Forestal: en condiciones deplorables vive pareja de discapacitados
Patricia Garrido y Mario Veliz habitan un pequeño cuarto en el sector de Bajo Edén. Ni siquiera cuentan con un baño.
Patricia Garrido tiene 53 años, pero representa mucho más debido a su precario estado de salud. Hace 4 años la mujer vive junto a su pareja, Mario Veliz, en un pequeño cuarto habilitado en medio de un terreno en el sector de Bajo Edén, en la parte alta de Forestal.
La pareja, ambos con discapacidad, agradecen la ayuda y apoyo de sus vecinos, pero en medio de la contingencia por la pandemia, sus enormes carencias han quedado más en evidencia que nunca.
Ni siquiera disponen de un baño donde poder asearse y las dificultades de desplazamiento que tienen - Patricia padece de una hernia que prácticamente no la deja vivir y Mario tiene dificultades en sus caderas - hacen que sus vidas se hayan hecho un verdadero tormento.
Vecinos
Fueron precisamente sus vecinos los que quisieron, con la autorización de ellos, hacer público el caso de Patricia y Mario, con la idea de poder generar alguna ayuda, o al menos generar mejores condiciones de vida para la pareja.
Graciela Jerez, dirigenta de la Población Alborada, cuenta que toda la comunidad está muy afectada por este caso, pues, asegura, las condiciones en que viven son infrahumanas.
"Hemos recurrido a distintas instancias, pero no sabemos qué más hacer. En el municipio han tenido toda la voluntad, pero entendemos que están ahora con el reparto de las cajas y hay menos gente. Lo que pedimos es que ojalá puedan sacarlos de donde están porque el estado en que están viviendo es terrible", comentó afectada la dirigente.
Como si todo no fuera ya suficiente, ni Patricia ni Mario saben leer ni escribir, situación que, según sus vecinos, probablemente les ha dificultado poder acceder a beneficios estatales. "Ellos viven de la pensión de invalidez de la señora porque el caballero recién está tramitando la suya", acotó Graciela.
La misma Patricia cuenta que ya el año pasado fue operada de dos hernias y que actualmente vive con una hernia en el bajo abdomen que le provoca mucho dolor.
"Yo ya no puedo más con esto. No puedo caminar, con el frío me duele más. No tengo esperanza de poder operarme debido a la contingencia por el virus, pero esta ya no es vida", ser quejó la mujer.