Plan retorno en al menos 6 semanas
Cristóbal Rivas, preparador físico del club deportivo Aurora del vecino país de Bolivia y presidente de la agrupación nacional que los reúne, explica el detalle de la preparación previa.
Nicolás Labra G.
La suspensión del fútbol debido al coronavirus ha cambiado los paradigmas en el fútbol chileno. Profesionales con poca cohesión han vuelto a establecer diálogos conjuntos en torno a su especialidad. Lo hicieron los entrenadores y también los preparadores físicos y profesores de la actividad, reunidos desde mediados de marzo por las gestiones de Cristóbal Rivas.
"Creo que sirve para sacar de la siesta que estábamos durmiendo los profesionales chilenos porque necesitamos tener presencia en el mercado, necesitamos valorarnos. Tanto preparadores como técnicos tenemos mucho que decir, tenemos grandes profesionales y sentíamos que faltaba juntarnos y debatir y no mirar tanto al extranjero", cuenta Rivas.
La entidad tuvo su primera asamblea a mediados de marzo con unos 80 profesores. Rivas quedó definido como el primer presidente de la Asociación de Preparadores Físicos de Fútbol de Chile y dice que el directorio está compuesto por 12 nombres, donde destaca a históricos del área. "Hay profesionales de renombre como Luis Rodoni, Marcelo Oyarzún, Ítalo Traverso, Luis Valenzuela, Hernán Torres, que son de los PF más relevantes en los últimos 15 o 20 años", comenta.
"Estamos a un paso de estar agremiados. Desarrollamos los estatutos asesorados por Carlos Soto, nos presentamos como agremiación en el ministerio de Economía y Fomento, y sólo falta firmar el documento para legalizarlo", detalla tras volver a Chile desde Bolivia, donde trabaja en el Aurora de Cochabamba.
-Varios dicen que ahora ha habido una apertura a compartir conocimientos. ¿Es muy individualista el fútbol?
-Lo que pasa es que en el fútbol hay mucho de egos y maneras de ser, y a uno no le gusta ser criticado. Por lo general, se tiene ese recelo de que, si tú hablas, va a haber alguien que te va a criticar. Hemos querido romper esos paradigmas y acercarnos todos. Yo crecí con Marcelo Oyarzún siendo campeón de la Libertadores y hoy lo tengo sentado conmigo en una mesa, Hernán Torres me formó, a Carlos Navarro lo vi con la U en los noventa.
Uno quiere saber cómo lo hacen, cómo trabajan, y ellos tienen mucho que decir y que contar. Mi primera motivación de esto es que no es necesario cruzar la cordillera para ir a capacitarse, acá hay gente muy capaz, ganadores, y había que juntarnos
-¿Tienen alguna propuesta para el retorno del fútbol? ¿Cuáles son las propuestas a futuro con la asociación que han formado?
-Queremos sacar una sugerencia tomando en cuenta las áreas como doctores, técnicos, psicólogos y nutricionistas para una vuelta a la práctica. Además queremos generar un centro educativo de educación física para el fútbol chileno. Más que quedarnos en un seminario, sentimos que necesitamos un área de capacitación y de extensión. Un centro que entregue cosas desde el punto de vista metodológico y también desde la experiencia y situaciones que ocurren en el fútbol que no aparecen en los libros.
La semana pasada, se informó que a los clubes se les hizo llegar de parte de la ANFP una propuesta con "Recomendaciones para el entrenamiento en miras al retorno al fútbol competitivo". El miércoles la Apeffu publicó su malestar porque no fueron incorporados.
Rivas lo explica: "Fue una propuesta sin ninguna mala intención, pero se equivocaron al no consultar a los reales involucrados, que hoy son los cuerpos técnicos y los preparadores físicos, quienes conoce la realidad interna".
Seis semanas
La Asociación Paraguaya de Fútbol presentó un plan para el retorno que implica seis semanas de trabajo, mismo plazo que Rivas dice que estiman en la comunidad de preparadores: "La primera fase es de evaluaciones físicas, sanitarias y antropométricas, para evaluar las condiciones en que llega el jugador. La segunda semana será de entrenamientos individuales, después un tercer periodo de entrenamientos en grupos de 3, 4 o 6 jugadores, y el último periodo será de tres semanas más de entrenamientos grupales del plantel".
La extensión del periodo dice que tiene que ver con que, a diferencia de la Bundesliga -donde faltaban ocho fechas-, en Chile y en la mayor parte de Sudamérica se ha disputado a lo sumo un 25% del torneo.
"En Alemania van a jugar esos 8 o 9 partidos y van a parar, nosotros necesitamos avanzar, desarrollar y terminar. Es mucho más exigente nuestro calendario, y para eso necesitas una mayor adaptación para competir y rendir".