Fabián San Martín D.

En condiciones infrahumanas vive un adulto mayor en Viña del Mar.

Pasadas las 01.00 de la madrugada de ayer, personal de la tenencia Nueva Aurora transitaba por la avenida Agua Santa, y al llegar a calle San José Poniente, se percataron de la presencia de un adulto mayor conocido de los funcionarios policiales, quien mantenía en el sistema informático un encargo por presunta desgracia.

Su estado de salud era deplorable, en una situación de abandono con evidentes signos de desnutrición, deshidratación, algunas lesiones y síntomas de hipotermia debido a las bajas temperaturas.

Los carabineros lo trasladaron hasta la unidad policial donde lo alimentaron y le dieron a tomar algo caliente para mitigar la hipotermia, y luego lo derivaron hasta el SAPU Nueva Aurora a constatar lesiones, donde el personal de salud quedó impactado por el mal estado del adulto mayor que reside en solitario en una casa de la calle Montemar en Nueva Aurora.

Malas condiciones

A ese domicilio fue llevado por los uniformados, que corroboraron "in situ" que el adulto mayor vive en precarias condiciones, donde no cuenta con servicios básicos ni un lugar adecuado para cocinar, realizando sus necesidades fisiológicas en un cuarto que está lleno de fecas, escombros y basura, y que la habitación que usa para dormir estaba afectada por la humedad y falta de higiene, provista de una cama con un colchón sin la necesaria ropa de abrigo para capear las bajas temperaturas.

Lo más frustrante para el personal policial fue que lograron tomar contacto con familiares de la persona, los cuales residen en San Felipe, y no le dieron mayor importancia a su desmejorada situación y señalaron que los vecinos tenía que hacerse cargo de su estado.

La policía uniformada dio cuenta del estado de abandono del abuelito al juzgado de familia de Viña del Mar, que se espera determine algunas medidas en su favor, o que algún otro organismo vele porque no siga viviendo en condiciones tan indignas.

Con un detenido terminó este fin de semana una persecución policial en la parte alta de Playa Ancha.

Personal de la tenencia Cordillera patrullaba por la avenida Santa María cuando detectaron a un conductor en actitud sospechosa, y al verificar la patente en el sistema institucional, se percataron que estaba encargado por un robo con intimidación en Quilpué. Al advertir la presencia policial el chofer escapó velozmente, hasta que a la altura de la población Valle Verde perdió el control e impactó de forma violenta contra un letrero en el bandejón central.

Se trataba de una SUV marca Peugeot modelo 3008, año 2017, blanca, la que resultó con daños de consideración en su parte delantera, mientras que se detuvo al prófugo identificado como M.SC., 23 años, alías "Sanguijuela", poseedor de nutrido prontuario y quien estaría vinculado a robos con intimidación en Playa Ancha y otros puntos de la zona.

En el mismo procedimiento los carabineros lograron recuperar otro automóvil sustraído, un Chevrolet Spark año 2010, que también fue obtenido mediante un robo con intimidación.

El imputado fue derivado al tribunal de garantía para la formalización de cargos, mientras que los móviles recuperados fueron entregados a sus propietarios.

Diversas diligencias realiza la policía uniformada para dar con el paradero de una pandilla que protagonizó un robo con intimidación en Valparaíso.

El delito se perpetró cerca de las 08.30 horas en un domicilio de la calle Juan Mira del cerro Larraín.

A esa hora cuatro sujetos que ocultaban sus rostros con polerones con capucha y mascarillas, violentaron la puerta principal del inmueble. Ya en el interior dos de los antisociales, que portaban armas de fuego, intimidaron al jefe de hogar identificado como D.C.S., ingeniero en sonido de 24 años, y a su pareja, a quienes bajo amenaza de muerte le exigieron la entrega de artículos electrónicos y otros bienes de valor por un monto indeterminado.

Huyeron

Consumado el ilícito los hampones junto con el botín, abordaron un automóvil marca Nissan, modelo V-16, de color blanco, en el que escaparon en dirección desconocida.

Al sitio del suceso acudió personal de la tenencia Rodelillo, quienes alertaron del hecho al fiscal de turno, Sergio Espinosa, quien dispuso que funcionarios de la unidad especializada OS-9 de Carabineros de Valparaíso indagara el caso.

Los policías empadronaron a las víctimas y testigos, fijaron fotográficamente el sitio del suceso y buscaron cámaras de seguridad que pudieran haber registrado el accionar de la banda delictual.