Jinete dedicó su triunfo a su abuela fallecida por COVID-19
Pese a sufrir tan irreparable pérdida y en homenaje a ella, el jockey Rodrigo Cortés cumplió con sus compromisos de monta en el Valparaíso Sporting y ganó una prueba que, por cierto, tuvo una clara dedicatoria al cielo.
Manuel Gómez Poblete
Con el corazón desgarrado y los ojos aún llorosos se ha presentado en las últimas dos reuniones hípicas (jueves 28 y sábado 30 de mayo), el jinete capitalino de habitual presencia en el Valparaíso Sporting, Rodrigo Cortés. Y es que si bien, la noche del miércoles -y ya estando en Viña del Mar- recibió la triste noticia de que su querida abuelita acababa de fallecer producto del COVID-19, tomó aire y fuerzas, respiró profundo y decidió cumplir con sus compromisos de monta, tal como su abuela, Celinda Rojas, lo hubiese querido, pues fue ella quien siempre le inculcó luchar por sus sueños y objetivos.
En aquel triste jueves para este jinete de 28 años de edad, Cortés cumplió con lo pactado, participando en 6 de las 15 competencias que contemplaba la reunión, no superando el quinto puesto en cuanto a resultados. Su revancha, sin embargo, que no fue fácil, se dio en la última prueba del sábado (y luego de otros cuatro intentos previos al mando de los finasangres "Diva Nuova", "Libardones", "Can Valles" y "Cheapman Bay"), puesto que junto al ejemplar "Tito El Grande", Rodrigo Cortés dio el batatazo (pagó $53.2 a ganador) al quedarse con el Premio "Ostentación", en una victoria que, obviamente, fue dedicada al cielo, tal como la fotografía adjunta captada por un histórico del recinto hípico viñamarino como Jaime Cortés Piccardo.
Antes de presentarse en las carreras de ayer en el Sporting (corrió en la 2a con "Facilito" e iba en la 5a competencia junto a "Niña de Italia"), Cortés atendió el llamado de La Estrella, relatando lo que ha vivido en esta compleja semana en lo personal y familiar.
"El miércoles en la tarde ya me venía a Viña cuando me llama mi hermano y me avisa que la iban a conectar a un ventilador artificial porque fue súper rápido. En la mañana empezó con problemas respiratorios, en la tarde la iban a conectar como a las 4, pero llegando yo a Viña me llaman de nuevo y a las 7 y me dicen que mi abuelita había fallecido. El jueves fue su funeral, pero yo no pude viajar (a Santiago) porque por temas de protocolo no podía entrar mucha gente y aparte como la hípica está recién volviendo, era un poco irresponsable ir al funeral de mi abuela si ella murió por COVID-19, viendo todas las medidas de seguridad que se han implementado en el Sporting".
-¿Su abuelita, Rodrigo, había presentado síntomas, estuvo hospitalizada?
-Nooo, nada. Mi abuela tenía 90 años, pero era una mujer súper sana. Ella estaba en un hogar de ancianos en la comuna de Independencia y ahí se debió contagiar ya que dos días antes habían avisado que una de las personas que trabaja ahí tenía COVID, pusieron a todos los abuelos en cuarentena y empezaron a caer de a uno, ya que mi abuela fue la quinta fallecida del hogar... si ni siquiera alcanzó a llegar al hospital, fue todo muy rápido.
-Usted, entonces, no alcanzó siquiera a despedirse...
-No porque, por protocolos de seguridad en el hogar ya no permitían visitas. Lo que sí hacíamos eran videollamadas, tengo videos que ahora al verlos me ponen triste.
-¿Cómo era tu abuela, si nos puedes comentar algo?
-Ella era una persona fuerte, sana, quienes la conocieron saben que mi abuelita siempre andaba de arriba pa' abajo y ayudaba en todo... a cocinar y hacer el aseo. Si hasta hace dos años atrás me andaba persiguiendo con una varilla cuando me portaba mal.
manuel.gomez@estrellavalpo.cl