Familia acusa erróneo protocolo COVID en hospital
Luis Villablanca, de 86 años, no pudo ser despedido por sus cercanos pese a haber dado negativo a la enfermedad.
Un duro duelo se encuentran viviendo los familiares y cercanos de don Luis Alberto Villablanca Villablanca, un adulto mayor de 86 años que falleció el pasado 6 de mayo en el Hospital de Quilpué, y quien pese a dar negativo a los exámenes COVID-19, fue sometido a los protocolos que se aplican a esta enfermedad, lo que significó que fuera sepultado el mismo día y sin la compañía de sus cercanos.
La más afectada, lógicamente es su viuda, por lo que sus hijos y nietos decidieron hacer público su caso para que, según señalan, situaciones tan dolorosas como éstas, no vuelvan a repetirse.
Dada la avanzada edad de don Luis Alberto y su grave cuadro de neumonía además de su hipertensión, todo su entorno se había preparado para un desenlace fatal, sin embargo, y tal como describe uno de sus nietos, Sergio Tudela, jamás pensaron que ni siquiera pudieran acompañar a su abuelo hasta su último lecho.
Exámenes
"Ha sido muy duro para la familia, en especial para mi abuela. Hasta el último día nosotros entendimos que mi abuelo tenía problemas respiratorios severos (...) Nosotros estábamos tranquilos con esto, porque jamás nos hablaron de que mi abuelo era COVID positivo, porque de hecho los exámenes existen, hay dos y señalan COVID negativo", precisó Sergio.
Y añade que precisamente esta información avalada en dos exámenes distintos - uno del Hospital de Peñablanca a donde ingresó don Luis en un primer momento y otro del Hospital de Quilpué - es la que les impide entender porqué en la causa de muerte expresada en el certificado de defunción, el hospital señale COVID-19.
"Nosotros tratando de indagar en todo esto nos comunicamos con la Seremi de Salud y ahí nos señalaron que es imposible que la causa originaria de muerte de mi abuelo sea por COVID porque ellos tienen los exámenes y éstos son negativos", precisó Sergio.
Junto con el dolor de la pérdida de un ser querido, la familia de don Luis tuvo que asumir la tristeza de no poder acompañarlo ni brindarle un funeral familiar como el que hubiesen querido.
"Pese a todos los esfuerzos que hizo la familia para que modificaran el acta de defunción, pues luego de dos horas de discusión en el hospital, en el recinto accedieron a poner 'sospecha' de COVID-19, ni siquiera pudimos estar con mi abuelo", acotó Sergio, quien añadió con tristeza que su "tata" fue sepultado el mismo 6 de mayo - día en que falleció- y que sólo pudieron llegar hasta el acceso del cementerio.
La familia de don Luis se encuentra evaluando la interposición de acciones legales en contra del Hospital de Quilpué.
Caso sospechoso
En relación al proceso de atención de paciente de 86 años y que falleció en el Hospital de Quilpué desde este recinto informaron, por medio de un comunicado, que "se trata de un paciente de avanzada edad que llegó en malas condiciones de salud y síntomas característicos a COVID-19. Durante su atención se mantuvo en aislamiento restringido, se le practicó examen PCR el cual resultó negativo, no obstante de acuerdo a la evaluación clínica y el resultado de las imágenes de scanner se mantuvo su condición de paciente sospechoso. Luego que el paciente lamentablemente fallece debido a su delicado cuadro de salud, se prosigue con el protocolo de atención que establece el manejo de paciente fallecido con sospecha de COVID-19". En la declaración también se lee que "junto con lamentar esta pérdida, el Hospital de Quilpué reforzará sus protocolos de comunicación con las familias afectadas, para asegurar un cabal entendimiento del proceso de atención. No obstante, el manejo de la atención del paciente se realizó según lo que establecen los protocolos y velando por la seguridad de pacientes y funcionarios. Es importante destacar que como establecimiento de salud velaremos de manera estricta con todas las medidas sanitarias dispuestas tanto para casos confirmados como casos sospechosos, con el objetivo de brindar seguridad en el proceso de atención".