Priscilla Barrera Ll.

Las movilizaciones desarrolladas a partir de octubre de 2019 y la actual pandemia por el COVID-19 han repercutido y lo seguirán haciendo en todos los rubros de la actividad económica y la construcción, gran generadora de empleo, lamentablemente no es la excepción.

Ayer, a primera hora de la mañana, dos trabajadores de un proyecto inmobiliario que se levanta en calle Lampa, en Viña del Mar, tomaron la radical decisión de subir sin implementos de seguridad a la grúa pluma a unos 60 metros de altura para protestar contra una supuesta desvinculación arbitraria; hasta el lugar llegó el Gope de Carabineros y los trabajadores bajaron luego de estar más de 5 horas en la estructura.

Pocos proyectos

Lo anterior permite graficar la incertidumbre en torno al futuro de la actividad en la región donde, según da cuenta el presidente regional de la Cámara Chilena de la Construcción, Gian Piero Chiappini, ya han paralizado, fundamentalmente por razones preventivas, 4 proyectos inmobiliarios que se encontraban en ejecución.

Para el ejecutivo, al término de la actual contingencia sanitaria, lamentablemente nadie saldrá indemne. "Es muy probable que en los próximos meses haya muy pocos proyectos (...) Va a haber un descenso muy importante en la realización de nuevos proyectos, se estima que del orden de un 60%", planteó Chiappini.

El ejecutivo recordó que la empleabilidad, asociada al rubro de la construcción, hasta octubre del año pasado era en torno a las 750 mil personas, sin considerar la mano de obra indirecta a través de empresas contratistas y otras.

"De acuerdo a estimaciones, a datos que se manejan, que no son ciencia exacta, prevemos que es muy probable que tengamos una cesantía en nuestra área, en torno al 12%, una cifra muy alta que no conocíamos ni siquiera en las crisis anteriores, como la Crisis Subprime o similares", planteó Chiappini, quien recalcó la necesidad de inyectar liquidez a las empresas para que éstas tengan la posibilidad de levantarse una vez terminada la pandemia.