Belén Velásquez y - Nicole Valverde - La Estrella de Valparaíso

Desesperación, temor e incertidumbre es la que viven los vecinos y comerciantes del centro de Viña del Mar luego de la violencia vivida en torno a la primera noche del Festival de la Canción, pese a los planes y anillos de seguridad que fueron anunciados con bombos y platillos por la autoridad. Según los residentes, "fueron un fracaso".

Y es que la quema de decenas de autos, los daños y/o saqueos a cerca de 20 locales comerciales, la destrucción del mobiliario público, y el ataque al municipio fueron "la gota que rebalsó el vaso", según Manuel, vecino que vive frente a la plaza Sucre, punto de reunión de los manifestantes desde que comenzó el estallido social en la ciudad jardín.

En ese punto de la comuna, cerca de las 17.00 horas del domingo comenzaron los enfrentamientos con Carabineros. La violencia fue escalando y con el correr de las horas, el clásico Hotel O'Higgins fue atacado, en el frontis quemaron siete autos, uno hasta fue lanzado a una barricada.

Más de 50 autos

A pocas cuadras, en calle Valparaíso, fueron saqueadas las tiendas Corona, Wom, PC Factory, entre otras. Hacia el lado oriente, la automora Cartoni sufrió la destrucción de más de 20 autos, uno incluso fue lanzado -por encapuchados- desde un segundo piso. A metros de allí, en la automotora San Marino, 18 autos fueron derechamente quemados.

A lo anterior se suma el ataque a cuatro vehículos que se encontraban en el estacionamiento de la Municipalidad por calle Quinta, por donde violentistas entraron y destruyeron las oficinas de Proyectos y del director de Infraestructura y Materiales. Barricadas, lacrimógenas completaron el escenario que desencadenó la molestia de quienes viven y trabajan en cercanías de la Quinta Vergara.

"La gente que entraba a la Quinta no tenía ningún problema, no les pasó nada, estaba lleno de carabineros y de rejas, pero ¿qué pasó con los que vivimos acá? Ellos vienen un rato y a nosotros que vivimos acá, que pagamos el retiro de basura, las contribuciones, nos vulneraron todos nuestros derechos y no fue Carabineros, como siempre acusan, fueron las autoridades que no supieron dar el ancho", reclamó Marcela, vecina del centro viñamarino.

Ella, al igual que cientos de personas que circularon por las arterias centrales de la ciudad, sufrió de los efectos de las lacrimógenas que quedaron esparcidas por las veredas y calzadas. Avenida 1 Norte con Libertad fue uno de los puntos críticos, precisamente donde se ubica la automotora Cartoni.

Su dueño, Paulo Cartoni, estimó los daños en más de $200 millones sólo en autos. "Es un tema que se veía venir y encuentro que Carabineros no da abasto para proteger a la ciudad. El Ejecutivo debería sacar las Fuerzas Armadas y resguardar Viña del Mar porque esto va a seguir, es una semana de Festival, una semana de vandalismo, es lumpen, delincuencia absoluta".

Para esclarecer lo sucedido en ambas automotoras, Fiscalía instruyó a la PDI, mientras que el ataque a los siete autos del Hotel O'Higgins se le asignó a Labocar y a la Sección de Encargo y Búsqueda de Vehículos (SEBV), ambas secciones especializadas de Carabineros de Valparaíso. La SEBV, además, recuperó especies robadas, avaluadas en $5 millones, y detuvo a 8 sujetos. En total la jornada terminó con 30 detenidos.

De los comerciantes, algunos se organizaron e hicieron rondas nocturnas para proteger sus locales. Sin embargo, unos 18 fueron vandalizados en distintos niveles.

Se salió de las manos

Al respecto, Daniel Romero, director de la Federación de Comercio y Turismo de la Quinta Región, afirmó que "estamos muy preocupados. Esto se salió de las manos, sigue avanzando, no va a parar. Acá se pidió un plan estratégico de seguridad (al intendente regional) y no fuimos escuchados y si esto no lo frenamos ahora, el Gobierno tiene que intervenir. No puede ser que estén destruyendo el comercio y la ciudad".

"Como locatarios nos sentimos indefensos, teníamos un plan (de seguridad) hecho por expertos y no fuimos escuchados. Queríamos que nos presentaran el plan de seguridad y nosotros acotar nuestro propio plan, pero hicieron oídos sordos. Ya estamos desesperados, estamos indefensos. Se nos prometieron muchas cosas de parte del municipio que no se cumplieron", acotó Humberto Rodríguez, presidente de la Asociación de Comercio de Viña del Mar y presidente de Comercio Unido de la misma ciudad.

La compleja situación vivida en la "ciudad bella" hizo que el comercio local se agrupara con los locatarios de Valparaíso, quienes lamentablemente han adquirido experiencia como víctimas de hecho de violencia ocurridos en el principal eje comercial del puerto desde el 19 de octubre pasado.

La idea, dice Raúl Rojas, presidente del comercio nocturno porteño, es evitar un "segundo Valparaíso". "Si la autoridad no se hace responsable, no resguarda los bienes de las personas en Viña de Mar ante el Festival, estamos en un enorme error. Un segundo Valparaíso es lo que queremos evitar y queremos darle un puntapié a las autoridades para que se pongan las pilas. (...) En el plan de seguridad se nombraban todas las calles que anoche (domingo) fueron golpeadas, que eran puntos estratégicos", afirmó el dirigente.

Desprotección

"Necesitamos más carabineros, pero también que los dejen actuar, la ciudad está desprotegida. ¿Qué quieren? ¿Una guerra civil? Sabemos que hay problemas, pero no puede ser que nuestra fuente de trabajo se vea afectada, hay gente que queda sin trabajo", sostuvo Romero.

En ese sentido, los gremios tanto porteño como viñamarino, anunciaron acciones legales. El abogado Leo Contreras explicó que mañana se interpondrá un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso debido a que -a su juicio- el Ministerio y la Subsecretaría del Interior no están integrando a los afectados en las estrategias.

"Le vamos a pedir a la Corte que le diga a la autoridad que haga su trabajo, mayor seguridad, mayor integración de los actores relevantes del territorio: comercio, juntas de vecinos. Mayor presencia de carabineros y que en la eventualidad de que existan otros eventos masivos, tengan resguardo policial adicional", señaló el abogado.

Asimismo, Contreras apuntó a una mala distribución de los carabineros. "Creemos que el perímetro de la Quinta Vergara debe estar resguardado por el organizador, que es la Municipalidad, no por Carabineros o la PDI. El organizador tiene que contratar a sus guardias, así como contrata el Everton o el Wanderers, así como contrata cualquiera que haga un evento en la Quinta Vergara. Se está perdiendo gran parte del contingente policial que podría estar resguardando la ciudad de los hechos violentos", sentenció el abogado.

Por su parte, el abogado Javier Gómez de Viña Transparente interpuso una querella criminal por los hechos de violencia ya descritos, argumentando que se trata de hechos punibles que "constituyeron delitos terroristas", por lo que se solicitó en la acción judicial que se soliciten las cámaras de seguridad del sector.

Desde el municipio, que ayer no atendió a público para limpiar el lugar de lacrimógenas, la alcaldesa Virginia Reginato emplazó al Presidente de la República, Sebastián Piñera.

La jefa comunal calificó lo ocurrido como "terrible" y dijo que "Viña del Mar fue brutalmente atacada por la delincuencia y es por eso que llamé al Ministerio del Interior porque quiero que se haga cargo de la seguridad. Mandarle un mensaje al Presidente de la República: la delincuencia no puede seguir en las calles de Viña, los chilenos queremos de vuelta la paz".

Cerca de 30 detenidos

En tanto, ayer en la Intendencia se realizó un Comité Policial en el que participó el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli; el intendente Jorge Martínez, y el general de Carabineros Sergio Yáñez, director nacional de Orden y Seguridad, entre otras autoridades.

El subsecretario del Interior, condenó los hechos de violencia en las calles y detalló que "fueron cerca de mil personas las que intentaron sabotear el Festival de Viña del Mar, pero no lo lograron, sin embargo concurrieron en hechos de violencia gravísimos por los cuales hay cerca de 30 detenidos, algunos de ellos por portar y lanzar bombas molotovs por los cuales iniciaremos acciones judiciales".

Por su parte, el general Yáñez anunció refuerzos con servicios de otras ciudades, particularmente de la región Metropolitana. "Vamos a aportar más elementos y más medios desde Santiago para generar mejores medidas de seguridad para poder tratar de evitar y mitigar que estos vándalos sigan destruyendo la ciudad".