El Valparaíso de verdad: turistas recorren zona cero del estallido
Rutas turísticas por El Almendral deben responder las interrogantes de los visitantes respecto al actual estado del comercio de calle Condell y los rayados de protestas.
Un grupo numeroso de turistas orientales se detiene en la esquina de calle Condell con Bellavista. Están impactados con el estado del edificio en que alguna vez funcionó una farmacia Cruz Verde, que fue saqueada y quemada en el contexto de las manifestaciones del estallido social.
Asoman sus cabezas hacia el interior de las ruinas del inmueble. Asombrados, hacen fotografías, graban, comentan entre ellos lo que ven.
En avenida Pedro Montt, una pareja de "gringos" se detiene frente al cine Hoyts, fotografían los carteles y los rayados con consignas en favor de las demandas sociales. Claro, es un cine, pero en vez de carteleras promocionando películas las murallas son lienzos de protestas.
Cerro 47 tours
Y es que los visitantes extranjeros se sienten atraídos -o al menos impresionados- con este nuevo panorama de ciudad.
Es por eso que conversamos con Sebastián Henríquez, fundador de Cerro 47 Tours, quienes ofrecen recorridos para conocer Valparaíso, puntualmente el barrio El Almendral, desde septiembre de 2018, y le consultamos su apreciación al respecto.
"Nuestra idea es enseñar la ciudad de una manera localista, debido a que en Valparaíso el 99% de los tour operadores van al cerro Alegre y Concepción, y los pasajeros se van con ese imaginario de Valparaíso como que es todo igual. Pero la ciudad no es así, no es un barrio británico o un barrio alemán", afirma Henríquez.
Y agrega: "Entonces empezamos a trabajar con rutas por El Almendral, que también tiene casonas y edificios hermosos con carga histórica. Nos juntamos en la plaza Aníbal Pinto y de ahí caminamos hacia la plaza Victoria".
Curiosidad
Lo que pasó un año después con el estallido social afectó las rutas turísticas por el plan de la ciudad. En ese aspecto, Sebastián Henríquez aclara que en Cerro 47 Tours no son partidarios de lucrar con el movimiento social, y menos con la desgracia del comercio saqueado y siniestrado, pero que sin duda es algo evidente y genera curiosidad en los turistas.
"Si el pasajero pregunta nosotros contestamos. Igual ellos vienen informados respecto al contexto político social que vive el país, y lo entienden. Entonces sus preguntas van más enfocadas al por qué llegamos a esto. Y ahí nosotros explicamos que es por una desigualdad social que viene desde hace muchos años. Pero más allá de eso no es que nosotros los llevemos a visitar los edificios siniestrados ni a las manifestaciones", explica.
Y añade: "De hecho una de nuestras rutas contempla una visita a La Sebastiana, la casa de Pablo Neruda, y tenemos que pasar por Bellavista y subida Ecuador, que es una zona de conflicto. La gente no viene con el morbo, entienden que es parte de...".
Proteger al pasajero
Además, Henríquez descarta que en Valparaíso haya una especie de "turismo oscuro" como en la serie documental "Dark Tourist" de Netflix, donde el periodista David Farrier visita lugares turísticos inusuales, como una planta nuclear abandonada en Chernobyl, un bosque embrujado o zonas de guerra.
"La principal preocupación de las empresas que brindan servicios turísticos, como los tours o recorridos a pie por la ciudad, es el bienestar y la protección del pasajero. No exponerlos es una regla de oro", asegura.
"De hecho, a muchos pasajeros les preocupa toparse con alguna manifestación, pero nosotros les explicamos que las manifestaciones son pacíficas y que los enfrentamientos son en la tarde noche. Y nuestros recorridos son a partir de las 9 de la mañana y otro a las 14:30 horas, desde la plaza Aníbal Pinto", agregó.
En ese aspecto, el emprendedor porteño reconoce que los visitantes que llegan a la ciudad Puerto vienen informados del acontecer político y social.
"En nuestros recorridos por el sector patrimonial, específicamente por la calle Lautaro Rosas del cerro Alegre, la gente ahora se saca más fotos en el mural que dice 'Sin Miedo', que reemplazó al que dice 'We are not hippies, we are happies'", concluyó Henríquez.