Pese a que colgó los botines hace tres años, Jorge Ormeño, el otrora volante y excapitán de Santiago Wanderers, continúa pendiente del devenir del club porteño y por lo mismo, sufrió más de la cuenta con este "extraño" cierre de campeonato.

Curiosamente, dos de los clubes con los que se identifica el jugador viñamarino, fueron los protagonistas de este fin de temporada. Por un lado Universidad Católica, declarado campeón desde el primer momento, pero al mismo tiempo sufriendo más de la cuenta con un Wanderers, que tuvo que esperar para por fin poder concretar el ascenso y levantar la copa.

-¿Cómo tomó esa decisión de cierre de torneo, donde a Católica lo reconocieron campeón de inmediato, mientras que Wanderers tuvo que esperar para gritar campeón?

La postura tenía que ir por el sentido común. Siento que se privilegiaron intereses económicos y no tanto deportivos. Yo estaba bastante consternado con la decisión de no ascender. Estamos peleando por justicia en la sociedad pero en el deporte, algo tan sano, esto no estaba ocurriendo. Yo no veo porque los dirigentes cumplen después la justicia deportiva pero cuando les tocan el bolsillo, no son capaces de repartir los dineros por igual. Eso me parece contradictorio. Ese pensamiento no es realmente lo que sienten, más bien lo hicieron obligadamente.

-¿Le entrega mérito a la gente por el hecho de salir a manifestarse a las calles en rechazo a esa decisión que los perjudicaba?

-Por supuesto, las marchas bien encaminadas siempre son buenas. En este caso se cumplió en parte lo que se pidió. Porque si bien algunos clubes enmendaron su error de la primera decisión, sobre todo con Wanderers que finalmente pudo ascender, hubo otros equipos que salieron perjudicados.

-De pronto en el fútbol sucede lo mismo a nivel social. ¿Cuál ha sido su reflexión en estos casi dos meses de movilizaciones?

-Desde la parte de la contingencia no soy un vocero, solamente soy un ciudadano más con cierto privilegio por haber tenido el fútbol como una herramienta para salir adelante. Hay mucha gente que lo está pasando mal. El gobierno debe tomar cartas en el asunto, hubo muchas marchas pacíficas que no fueron tomadas en cuenta pero en algún momento tenía que haber un remezón. Solo espero que el gobierno reaccione lo más rápido posible. Que muestren un sentimiento de empatía y que se puedan solucionar las demandas que son totalmente justas.

El retorno

Su vasto recorrido en primera división, junto al Decano y a Universidad Católica, le entregan mérito suficiente para proyectar un año importante al club porteño. Pese al optimismo que entrega el ser campeón, cree que el equipo debe potenciarse si no quiere pasar zozobras en la serie de honor el próximo año, y reconoce que la cantera sigue siendo el pilar de la escuadra verde.

-¿Cómo proyecta a Wanderers para la división de honor el 2020?

-La columna vertebral de Wanderers la veo débil para Primera división. Wanderers debe apoyarse en refuerzos de calidad porque nos seguimos sosteniendo con la cantera. Nos ha dado sustentabilidad en el tiempo, los canteranos se han esforzado harto esta temporada pero en Primera División cuesta el doble. Yo continúo esperando más de Jaime Pizarro, porque todavía no veo que el Gerente Deportivo marque la diferencia. Hasta hoy solo he visto organización administrativa y alguna contratación por aquí por allá, pero es muy poco.

-¿Aprueba el proceso de Miguel Ramírez en la pasada temporada?

-Miguel tuvo un año de altos y bajos. Arrancó con una expectativa tremenda por lo que había sido el año anterior. En algún momento hizo cambios que fueron dubitativos pero en los últimos cinco partidos se logró retomar el rendimiento que nos hizo estar expectantes. Todos vimos la manera de jugar bien clara cuando llegó el 2018, cuando desde lo más bajo nos permitió pelear por el ascenso, y ahora empezó bastante irregular pero logró corregir el camino a tiempo, con un equipo con carácter, avasallador, con ideas. Esto en un premio a lo que se hizo y su renovación es totalmente merecida. En un técnico con proyección y ojalá que el próximo año de un salto de calidad.

-¿Su objetivo sería mantener la categoría, alcanzar una copa internacional o competir por el título?

-Hoy por hoy, no en tan descabellado pelear por un cupo a un torneo sudamericano, ya que se premian hasta el séptimo lugar como para comenzar haciendo bien las cosas, sabiendo que será un regreso a Primera. Hay que instalar una manera de juego dentro de la cancha.

la cantera"

Lucas Suárez Torres

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