"Glorias Navales": cuatro retratos sobre Viña
El joven escritor Diego Armijo lanza hoy un compendio de textos en prosa experimental que circulan entre los cerros, el mall y la población Vergara.
Redacción - La Estrella de Valparaíso
La escritura sobre el territorio ha estado vinculada a Valparaíso, a las provincias, pero pocas veces a Viña del Mar, una ciudad que si bien ha sido cuna de grandes escritores, no ha sido tan profusamente descrita en la literatura como su vecina Valparaíso.
Diego Armijo, 25 años, escritor, asiduo participante de eventos literarios en la región y vecino de Glorias Navales, decidió recorrer el territorio de Viña y escribir sobre él. Así nació "Glorias Navales", un libro de prosa experimental -que mezcla narrativa, poesía y crónica-, donde el autor retrata habitantes y espacios de la Ciudad Jardín, desde una mirada cruda y fuera de la impronta turística. El texto será presentado hoy, a las 18.30 horas, en la sede de Balmaceda Arte Joven Valparaíso (Santa Isabel 739, cerro Alegre).
Esta misma institución fue la encargada de la edición de "Glorias Navales", un breve compendio de cuatro relatos que transitan por Viña del Mar, como resultado de una experiencia de escritura territorial, como describe el mismo Armijo, quien participó en un taller sobre esta modalidad en 2018.
"Quedé con el bichito de escribir desde el territorio sobre Viña del Mar, pues el taller era solo desde Valpo. Entonces me puse a recorrer sobre qué escribir; de ahí aparecieron la Feria Caupolicán, los limpiaparabrisas de afuera del mall de 15 Norte, el recorrido por la población Vergara y los trabajos en calle Valpo ", señala Armijo.
El procedimiento escritural es experimental; no se impone un registro, sino varios, que van desde la crónica a la prosa, pasando por la poesía.
"No busqué plantarme en esos lugares con un estilo ya armado, a la manera de 'Laguna', de Bisama, que es una novela santiaguina sobre Viña del Mar, sino que al pensar los lugares, y escribir, se fue armando la manera más cercana de cómo deben ser escritos esos espacios. Es así como en el texto sobre la feria las palabras y frases están tiradas en la página como los productos que se ofrecen están sobre los paños, en un desorden significativo, digamos (...) Se forma una prosa atravesada por recursos poéticos y tipográficos, lo que da este resultado", añade.
Aunque la mayoría de los textos suceden en el centro de Viña, el autor explica que "los personajes son todos de cerro, o sea, piensan y se mueven en un espacio que no les pertenece por piel o clase, pero lo necesitan para trabajar o andar por lugares que tienen mar. De ahí que aparezcan imágenes como los limpiaparabrisas que pululan cerca del mall, guarecidos por las palmeras y el puente que une los malls, como sujetos sumergidos en el espacio, pero siempre bordeando una normalidad viñamarina. Y eso también me hace pensar en que hay muchas poblaciones, apartadas de la cara turística, que dependen de ese centro, y que ahora se hace más evidente al ver la plaza Sucre oscura y rayada, tan parecida a los trozos de tierra que llaman plaza, arriba en los cerros, que siempre han sido así".